Desde la federación lamentan el escaso apoyo económico de las instituciones para un torneo «excepcional» en Viveiro
26 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El campeonato mundial de biathle y triathle que se disputó en Viveiro pasará a la historia por ser el primero que se celebra en España y por el título conquistado por el equipo español en la categoría élite, hasta ahora imposible. A la hora de hacer balance, en la Federación Española de Pentatlón Moderno no pasan por alto estos detalles, como tampoco la participación y los beneficios económicos que tuvo para la comarca mariñana en general y para Viveiro en particular.
«El balance que podemos hacer es, en general, muy positivo. Compitieron más de 500 deportistas, entre ellos dos excampeones del mundo y un campeón olímpico», señala Francisco Villanueva, vicepresidente federativo, sorprendido por las impresiones que se llevaron los atletas y rotundo a la hora de abordar la repercusión económica. «A la Federación nos habrá dejado déficit, casi seguro, pero para la comarca y sobre todo para Viveiro el impacto económico debió ser tremendo», apuntó Villanueva, quien subraya que «hubo selecciones que llegaron el día 17 y se marchan el 28» y lamenta el escaso apoyo económico que recibieron de las instituciones para llevar a cabo un evento que trajo a «unas 1.500 personas»: «No vimos ni un duro. El Concello viveirense por lo menos puso medios materiales y humanos».
Acerca de la actuación de los representantes españoles, que sumaron 24 medallas a lo largo de los cuatro días de competición, Francisco Villanueva la tildó de «aceptable».
Cuotas de inscripción de hasta 90 euros por prueba
Competir en un Mundial de biathle y triathle solo es gratis para los aspirantes de la categoría sub-17 hacia abajo y para las delegaciones de aquellos países con una renta per cápita inferior a la media, como pueden ser India o Pakistán. En Viveiro, según explicó Francisco Villanueva, el vicepresidente de la federación nacional de pentatlón moderno, el resto hubo de pagar cuotas de inscripción de hasta 90 euros por prueba individual y 30 para apuntarse en las de equipo. Las tarifas se reducían casi a la mitad para los representantes españoles.
Solo Sudáfrica y Gran Bretaña superaron a la selección española
De los 20 países que finalmente contaron con representación en Viveiro -Mónaco no aparecía en el listado oficial y presentó aspirantes-, solo cinco se fueron sin medallas: Ucrania, Pakistán, Letonia, Ecuador y Bielorrusia. Sudáfrica fue, con diferencia, el mejor en el apartado de premios. Acumuló 64 preseas, 28 de oro, 23 de plata y 13 de bronce, más de doble que su inmediato perseguidor en el medallero, la delegación de Gran Bretaña, que se llevó 29. El tercer lugar en el ránking lo ocupó España con 24 medallas, 7 de oro, 7 de playa y 10 de bronce.