Las pensiones de los barbanzanos subirán entre 28 y 43 euros al mes

Marta Gómez Regenjo
Marta Gómez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

La revalorización de las prestaciones en el 2024 conforme al IPC está garantizada

04 oct 2023 . Actualizado a las 21:12 h.

La revalorización de las pensiones anualmente conforme al IPC está garantizada por ley, de manera que la situación de incertidumbre política que reina actualmente ante las dudas sobre la investidura de un nuevo Gobierno no afectará al bolsillo de los jubilados el próximo año. Como ocurre siempre a estas alturas de ejercicio, pensionistas y economistas empiezan a echar cuentas sobre cuánto subirán las prestaciones y las previsiones apuntan a que en el 2024 el incremento se situará en torno al 4 %, lo que significa que el importe que perciben los barbanzanos aumentará, de media, entre 28 y 43 euros mensuales.

Para calcular la subida de las pensiones se toma como referencia la media del IPC entre diciembre del año anterior y noviembre, así que habrá que esperar a final de año para tener la cifra definitiva. Con todo, las previsiones de organismos como el Banco de España cifran el porcentaje entre el 3,6 y el 3,9 %, y teniendo en cuenta que el incremento hasta agosto —el último dato disponible— es del 3,88 %, puede tomarse como referencia este dato. Siendo así, la pensión media de los vecinos de Barbanza, que se sitúa en algo más de 930 euros, aumentará en 36,28 euros mensuales.

Más de un millón

Teniendo en cuenta que, según los últimos datos del Instituto Galego de Estatística (IGE), en los 11 municipios del área barbanzana hay 31.471 pensionistas, el incremento previsto para las prestaciones supondrá a las arcas públicas un coste total a mayores de 1,14 millones de euros al mes.

Con todo, y como se pone siempre de relieve, los importes de las pensiones responden a medias y varían sustancialmente de unos ayuntamientos a otros y, en consecuencia, unos ciudadanos notarán más que otros la revalorización de las pagas que reciben. De este modo, los vecinos de A Pobra son los que verán aumentadas sus retribuciones en mayor medida, 43 euros mensuales, lo que situará la prestación media en el 2024 en 1.146 euros al mes. Junto con los ribeirenses, cuyas pensiones aumentarán en 42,23 euros, hasta alcanzar los 1.125 euros, son los únicos cuyas prestaciones están por encima de la media gallega.

El tercer importe más elevado es el que reciben los noieses, 1.034 euros a los que previsiblemente se sumarán otros 40,33 con el inicio del nuevo año. Los pensionistas de estos tres municipios son los únicos mileuristas de la comarca, todos los demás se sitúan por debajo de esa cifra. Los de Mazaricos, con 728,50 euros de media, siguen siendo los barbanzanos que menos cobran y, en su caso, el incremento en el 2024 será de en torno a 28 euros.

 

La plataforma de jubilados se rearma tras el fin de las manifestaciones

Durante unos dos años, los jubilados de la comarca, agrupados en diferentes plataformas, estuvieron saliendo a la calle regularmente para reclamar unas pensiones dignas y, sobre todo, que se actualizasen de acuerdo al incremento del coste de la vida para no seguir perdiendo poder adquisitivo. Garantizado esto, y sobre todo con la irrupción de la pandemia, las movilizaciones decayeron, sin embargo, el colectivo ribeirense se está rearmando y hace unos días se convocó una asamblea informativa.

La iniciativa estaba abierta a la participación de toda la ciudadanía y su objetivo era dar a conocer una serie de medidas novedosas de las que pueden beneficiarse las personas viudas o herederas de jubilados fallecidos. Una vez que las manifestaciones tocaron a su fin, la Plataforma Cívica de Pensionistas e Xubilados de Ribeira se ha reactivado con un nuevo objetivo: «Informar ás familias traballadoras de cuestións que lles poden beneficiar economicamente».

Pancartas

En vista de que el ejemplo no cundió puede sonar a palabras huecas, pero lo cierto es que los pensionistas dieron toda una lección de dignidad y de movilización para exigir lo que consideraban justo. Fueron los miembros de la denominada tercera edad los que se pusieron detrás de las pancartas con lluvia, sol y lo que cayese para reclamar pensiones dignas, y no estaría de más que el resto, más jóvenes y en teoría más enérgicos, tomásemos nota y aprendiésemos que no está de más sacar la pancarta de vez en cuando.