Beatriz Suárez: «Es clave innovar, diferenciarse en el mercado»

Una mirada de optimismo. La Fundación Juana de Vega, en colaboración con la Fundación Pondal y La Voz de Galicia, promueven para este sábado un foro de iniciativas rurales en la Costa da Morte: 09.30 horas, en O Couto. El encuentro, con el lema O érbedo verde ten súa sazón, pretende ahondar en «proxectos vizosos» que destacan en el rural de esta comarca. Beatriz Suárez, directora del área de Desenvolvemento rural de la Fundación Juana de Vega, con sede en Oleiros, intervino este martes en Radio Voz.

—¿Qué objetivos tiene con este foro? ¿Tiene futuro el rural?

—Uno de ellos, efectivamente, es poner sobre la mesa que hay oportunidades y necesidades por cubrir en el rural a través de iniciativas de emprendimiento. Por tanto, que los asistentes puedan empaparse de la ilusión y los proyectos de éxito que se presentarán esa jornada. De otro lado, exponer que hay entidades, como la Fundación Juana de Vega o la EFA Fonteboa de Coristanco, que están haciendo una labor de apoyo a empresas en el rural, un asesoramiento y un acompañamiento en todas las fases del emprendimiento. Mostraremos cómo. Más allá del apoyo financiero, necesario, ese acompañamiento es clave para que muchas empresas lleguen a buen puerto.

—De qué se ocupa su área?

—Pretendemos dinamizar los sectores productivos a través de diversas iniciativas. Formación y divulgación; planes de dinamización estratégicos para el sector lácteo, el cárnico, el vitivinícola..., turismo sostenible... Una de nuestras labores más importantes, y que llevamos desarrollando hace diez años, es el apoyo al emprendimiento a través de un programa para empresas agroalimentarias. Por nuestro bagaje, en nuestra fundación estamos más especializados en el apartado agroganadero y forestal, pero es cierto que cualquier oportunidad desde el medio rural hay que tenerla en cuenta, y más a raíz de nuevas posibilidades que surgen tras la pandemia, como es el caso del teletrabajo. Se pueden prestar muchos servicios desde este ámbito, y no solo para el propio rural, sino para toda Galicia y más allá.

—Qué mensaje traen?

—Cuáles serían, por decirlo así, las claves del éxito de un proyecto. Algo fundamental: la innovación, diferenciarse en el mercado. Este valora muy positivamente, por ejemplo, la cuestión de la artesanía, la marca Galicia, lo nuestro, lo que se produce aquí. Sobre la mesa queremos dejar clara esa posibilidad de apoyarse en metodologías de emprendimiento innovadoras, adaptadas al entorno y a sus necesidades, que por tanto permiten desarrollar planes de negocio más viables. Hay muchas entidades brincando apoyo, y lo que necesitamos es gente que ponga en valor los recursos del rural, que fije población y genere economía. Que se escoja este modo de vida como una oportunidad para desarrollarse, una vía de futuro.

—Se verán este sábado proyectos del ámbito forestal, huerta, ganadería... Qué opinión le merecen?

—Son iniciativas muy interesantes, también asociativas, caso de la Sofor, de gestión forestal. Empresas que apuestan por modelos diferentes, como la granja escuela Villa Regina, que pasó por nuestro programa de apoyo a empresas, y que organiza visitas a escolares, talleres... Colectivo Xebre; un proyecto de apuesta por la raza cachena... Será toda una oportunidad de compartir cómo ha sido el proceso, cómo han conseguido llegar a ser empresas, los obstáculos que superaron... Ser emprendedor y proactivo es una faceta que todavía se debería trabajar mucho más, ya desde los coles, así que yo digo que los responsables de estos proyectos, y en general todo aquel que se anima a emprender, tiene gran mérito. Se verá en el foro su ilusión, y además la importancia de que el consumidor dé valor a estos productos, y a lo que generan para la sociedad, a nivel de protección frente a incendios, protección de paisaje... Merecen un precio justo.

—La Fundación Juana de Vega nace en 1872, para apoyar el rural. ¡Y esto sigue siendo necesario!

—Estamos justamente en el 150.º aniversario, y hay retos muy similares a aquella época, pero con una visión diferente. Estamos en un momento de incertidumbre, es cierto: se sigue abandonando el rural, pero también a raíz de la pandemia hay quien ha decidido volver a él. Puede parecer algo genérico, pero como retos diría que el rural tiene que adaptarse al cambio climático, recuperar modelos tradicionales... pero siempre a través de la innovación.

—Tenemos que querernos más?

—En general diría que sí, en toda Galicia, pero hablando concretamente de la Costa da Morte, es una comarca con muchas oportunidades. Hay un sector que creo que debería de desarrollarse de una forma sostenible, el del turismo: puede traer asociadas muchas empresas. Un turismo de costa, pero de calidad, slow. El Camiño dos Faros, por ejemplo, está siendo muy valorado internacionalmente. Y luego seguir trabajando el sector agrogandeiro y forestal es también muy necesario, igualmente desde ese punto de vista de cuidado y respeto al medio.

---

---

---