Los vecinos de la punta de Mera alertan de que la costa se desploma

Antón S. Rodríguez OLEIROS / LA VOZ

A CORUÑA

ANGEL MANSO

Las rocas impiden el acceso a la playa y el jardín superior anuncia derrumbe

22 sep 2023 . Actualizado a las 20:03 h.

La península coronada por los faros de Mera esconde un pequeño arenal en el que se refugian los habitantes de las casas vecinas, mientras la invasión estival se pelea por un trozo de la playa de Espiñeiro. Pero en este año plagado de incógnitas, los vecinos de las rúas Gaivota y Alcatraz se preguntan si su playa seguirá ahí cuando pase la primavera.

Porque esta cala, de nombre O Xunqueiro, está sufriendo como pocos el desgaste de la costa, al punto de convertirse en una zona peligrosa. Aquí no caen cascotes, aquí se vienen abajo rocas que doblan en dos las pequeñas embarcaciones y han acabado improvisando un muro que impide el acceso a la playa. Mirando hacia la parte elevada, a unos 20 metros de altura, se observa que la valla de la carretera cuelga del revés sobre el acantilado, fruto de otro desprendimiento que lleva así más de un año. «Y por ahí pasa el camión de la basura», alerta Francisco Pita, uno de los vecinos de esta zona que podría considerarse la proa de Oleiros. «Vemos cómo con el paso del tiempo esto se va agravando», explica. Ya no es solo liberar el acceso a la playa. Cada vez son menos los que se atreven a parar en ella por la perenne amenaza de desprendimientos.

ANGEL MANSO

Desde aquí todo lo que no es mar emite síntomas de peligro. La Policía Local y la Guardia Civil ha dejado su mensaje de no pasar en forma de cintas perimetrales junto a las últimas rocas caídas. Pero también las hay en el jardín superior, un mirador cuidado con bancos y césped. Roberto Fagil señala una zona en la que se observa que el suelo se abre. «Es como una trampa». La erosión de los temporales hace fácil prever que la parte más próxima a la costa no tardará en desplomarse. «Estas rocas no tienen consistencia, van filtrando la lluvia y se van desmontando hasta acabar cayendo», señala Antonio Grueiro, quien no se explica que nadie, la Administración que sea, no haya colocado una red de seguridad. Adriana Cortés se dirigió al Ayuntamiento de Oleiros vía telefónica para avisar del último desprendimiento de rocas. «Pasé por cinco departamentos hasta que alguien me dijo que eso lo llevaba directamente el alcalde con Costas», indica la vecina.

Las dos versiones del Concello

Y precisamente el alcalde, Ángel García Seoane, aseguró que había acudido ayer a las oficinas de la Demarcación de Costas en A Coruña para tratar varias zonas del municipio, entre ellas este de la Punta do Bufadoiro y, por sus palabras, no hay muchas razones para el optimismo. «Decían que non tiñan nada que facer [en alusión a Costas], quen non ten que facer é o Concello, e mandeilles que vaian velo, e que liberen o acceso desa cala», señaló García Seoane. Preguntado en la radio municipal si no hubo un compromiso por parte de Costas sobre O Xunqueiro, el alcalde señaló que el único «medio compromiso no que estaban medio animados era no de repoñer area na praia de Santa Cruz». Pero por la tarde, el Concello de Oleiros envió un comunicado, citando la misma conversación, en el que aseguraba que Costas se comprometía a reparar el acceso a la cala do Xunqueiro.