Nueve platos de película que puedes comer en A Coruña: de los tomates verdes fritos al «mac and cheese»
VIVIR A CORUÑA
El cine y las series llevan décadas sirviendo de escaparate de canciones, prendas de ropa y, también, elaboraciones culinarias. En la ciudad herculina puedes revisitar «Sexo en Nueva York», «Cuando Harry encontró a Sally» o «El Padrino» poniéndote las botas
15 abr 2023 . Actualizado a las 12:26 h.A Coruña fue el año pasado un gran plató para el rodaje de varias películas y series, que se estrenan este 2023. Un pasado por delante, Operación marea negra o Fatum son solo algunas de ellas. Sin embargo, la ciudad herculina también ha experimentado en los últimos meses la apertura de varios locales de hostelería que tienen en carta platos que se hicieron internacionalmente conocidos gracias al cine o la televisión. Uno de los últimos es la experiencia culinaria de la Mardi Gras, que los sábados prepara tomates verdes fritos, título de la película basada en la novela homónima de Fannie Flagg y protagonizada por Kathy Bates.
El bocata de pastrami de «Cuando Harry encontró a Sally», en Caldito (Damas, 19)
Esta película ha pasado a la historia por el orgasmo fingido que el personaje de Meg Ryan espeta al de Billy Crystal en la cafetería Katz's. Sin embargo, lo que estaba comiendo Harry era un bocata de pastrami, una receta que nació en Manhattan y popularizó el local que aparece en esta película. La vermutería Caldito lo prepara con pastrami, mayonesa, mostaza, pepinillos y rúcula.
Los «mac and cheese» de, por ejemplo, «Érase una vez en... Hollywood», en Fábula (Alameda 17)
Esta es una de las recetas estrellas de la gastronomía estadounidense. Un calórico plato a base de pasta, queso sin límites y nata. Brad Pitt es el encargado de hacerla en la película dirigida por Quentin Tarantino. Pero este es un plato habitual de las series y películas norteamericanas, otro ejemplo es en Todo el mundo odia a Chris. El restaurante Fábula es un buen sitio para probar una versión de esta receta mucho menos contundente y con materia prima gallega.
La «red velvet» de «Magnolias de acero»
Magnolias de acero es una de las películas más lacrimógenas —y con mejor elenco— de los 90, y a muchos les descubrió una tarta que para la generación millennial es ya un clásico: la red velvet. Entre la sociedad neoyorquina se puso de moda años antes, pues era uno de los clásicos del hotel Waldorf Astoria. Y también en Nueva York se dio a conocer de verdad para el gran público gracias a la serie que le rindió homenaje a la Gran Manzana. Con Sexo en Nueva York se democratizó el cosmopolitan, el brunch y los cupcakes gracias a la pastelería Magnolia Bakery, donde ahogaban sus penas en azúcar Carrie y compañía, y donde se sirve una de las mejores red velvet de la ciudad.
En A Coruña esta tarta puede encontrarse en algún que otro restaurante y pastelería. Suelen tenerla, por ejemplo, en Amasarte, una panadería con establecimiento en la avenida de Oza y la avenida de Finisterre que ya se ha consagrado como un templo para los amantes del dulce. Además, las empanadas son imprescindibles y el pan de nueces y arándanos, una delicia.
Los «cannoli» de «El Padrino»
Los Corleone descubrieron a muchos espectadores Little Italy, cuyo olor a parmesano traspasa la pantalla, y platos de la gastronomía transalpina más allá de la boloñesa y la pizza. La frase de Peter Clemenza «deja el arma y coge los cannoli» puso sobre el mantel de los españoles unos canutillos rellenos de queso ricotta que hoy hacen las delicias de los amantes de esta cocina. Por cierto, la recomendación de lanzarse al postre no estaba en el guion.
Si a uno le entra la gusa y quiere darse un homenaje con este dulce siciliano aderezado con pistacho, tiene una cita ineludible en Ostería Peroni, en Padre Feijoo. Es uno de los imprescindibles de la carta de este restaurante —mucha atención también a los espaguetis con vongole— y la ocasión perfecta para rendirse al mundo del carbohidrato.
Los donuts de colores de «Los Simpson»
Como siempre, en Los Simpson fueron un paso por delante también en eso de la moda de los pasteles cuquis. Los donuts que habitualmente comía Homer Simpson son un icono culinario de la serie, con permiso de la cerveza Duff. Rosas, y con virutas de colores, fueron una de las obsesiones de los niños de los noventa. Ahora, en A Coruña pueden encontrarse, por ejemplo, en Loops & Coffee, el auténtico paraíso de los amantes de este tipo de rosquillas. Está situado en Marineda City.
Pizza margarita napolitana de «Come, reza, ama»
Si vamos a comer una modesta pizza margarita, le podemos poner un poco de épica pensando que emulamos a Julia Roberts en la película Come, reza, ama. La estrella de Hollywood puso de moda la pizzería Da Michele, en Nápoles, donde al parecer se sirve la única e inigualable pizza margarita napolitana. En A Coruña hay una versión bastante fidedigna en Terra Mia. Este local, situado en Juan Flórez, pretende dar a conocer las verdaderas bondades de este manjar italiano a los herculinos, basando la clave de su éxito en la mejor materia prima. sus productos llegan de Italia y tienen denominación de origen, por eso uno puede ver el cielo culinario con una sencilla pizza napolitana.
El bocata de albóndigas de «Friends», Bocatería La Tradicional (Cultura, 12)
Los bocatas son el plato preferido de Joey, uno de los protagonistas de la serie Friends. Y si no que se lo digan a su hermana pequeña Gina, que lo invitó a uno el día que le contó que se había quedado embarazada. Entre ellos, el de albóndigas es uno de sus favoritos. Aquí, en A Coruña, se puede comer buenas albóndigas en muchos sitios, pero en bocata no tantos. La Bocatería La Tradicional es uno de ellos.
Las patatas de Bonilla a la Vista de «Parásitos» (y su versión mini)
En esta lista de recetas cinematográficas no podía faltar las patatas Bonilla a la Vista. Su icónica lata salió en un frame en Parásitos, ganadora del óscar a la mejor película. La razón tiene que ver con que esta marca coruñesa está muy arraigada en el mercado de Corea del Sur. De hecho, sus latas se han convertido en un objeto de deseo que inspiran para hacer complementos y elementos decorativos. Un formato que se ha renovado con una versión mini, que presentarán la semana que viene en el Salón Gourmet y que ya vende en la cadena los hoteles Ritz de Madrid y Barcelona.