La Ruta 66 española ya tiene pasaporte: de «road trip» por la N-VI con destino A Coruña
VIVIR A CORUÑA
Este proyecto turístico ha cumplido el objetivo de poner en marcha una credencial que invita a disfrutar de la famosa carretera
13 jul 2023 . Actualizado a las 18:17 h.La Ruta 66, la de EE. UU., es solo eso, una carretera. Igual que la Nacional N-VI, su importancia histórica reside en estrenar las primeras conexiones por carretera de un país, y su final es el mismo: ambas terminaron siendo sustituidas por vías mejores y quedaron en el olvido. Sin embargo, la americana comenzó a revivir en los noventa gracias al cine y la televisión, mientras que la española languidecía con la llegada del nuevo milenio, con cigüeñas anidando en los postes de los arcenes, siluetas de toros de Osborne y millones de grietas en la calzada. Ahora, eso parece haber llegado a su fin gracias a Xosé Ramón Nóvoa, que trabaja por revitalizar esta vía.
La comparación entre ambas carreteras no es casualidad. Es el origen del proyecto. Fue en el 2017, cuando Xosé Ramón se introdujo en una experiencia vital recorriendo la Ruta 66 de Estados Unidos. Un sendero turístico con gasolineras abandonadas, moteles en dudoso estado de conservación, y el aislamiento individual de las caravanas. «Quedamos moi sorprendidos cando vimos a potencialidade da estrada abandonada», señaló Xosé Ramón a La Voz. Una fascinación que, en cambio, no les resultó ajena: las gasolineras desangeladas de la ruta tenían un gran parecido con las de Montesalgueiro (Aranga) y las del resto de localidades que se quedaron sin tráfico, el que cambió la nacional por la autovía.
Esta idea no cayó en saco rotó. Se convirtió en un proyecto real en el 2021. Bajo el título Ruta N-VI: la experiencia de carretera slow travel, fue uno de los tres proyectos ganadores de la aceleradora de proyectos turísticos TurisLab de la Xunta de Galicia. Durante el año 2022 comenzaron a trabajar en modo de pruebas. Y este 2023 lanzaron el pasaporte oficial de la N-VI. «Vemos una oportunidad real de convertir esta vía en un destino atractivo para los amantes de la carretera», cuenta Xosé Ramón. «Solo Madrid tiene seis millones de habitantes», añade.
El pasaporte de este proyecto se consigue en su página oficial y es clave para tener una experiencia completa a lo largo de los más de 600 kilómetros que cubre la ruta. Da acceso a la propia acreditación física, que llega a casa, y a un mapa con las zonas de mayor interés turístico de la experiencia, sitios donde poder hospedarse o para disfrutar de la gastronomía más tradicional. Además, hay una serie de ubicaciones elegidas que son las autorizadas en sellar el pasaporte. Al conseguir cinco cuños, la organización expide un diploma y se entra en un sorteo especial, que se resuelve a final del año.
La panadería O Fono de Cañoto, los establecimientos de Bonilla a la Vista o el hotel Alda Santa Cistina son algunos de los puntos oficiales de sellado. Respecto a las recomendaciones gastronómicas, destaca opciones tan tradicionales como Casa Tomé y Mesón O'Pote, ambos en el área de Betanzos y con la tortilla de patata como plato estrella.