Desde Italia insisten en que el asturiano dejará la Scuderia
23 sep 2014 . Actualizado a las 19:30 h.«Sí, de momento». Tres palabras que, en boca de Marco Mattiacci, han reabierto una caja de Pandora que parecía cerrada. Ni siquiera el óptimo cuarto puesto logrado en la noche de Singapur, ni las buenas sensaciones que dejó Fernando Alonso en el circuito urbano asiático, ni los 45 segundos que le endosó a Räikkönen y que el español recalcó, con el aguijón bien afilado, ante los medios. La continuidad de Fernando Alonso en Ferrari sigue en el ojo del huracán de la actualidad informativa de la Fórmula 1.
Marco Mattiacci, director de la Scuderia y presidenciable a medio plazo, apagó el incendio con más gasolina. La pregunta era sencilla, sin ambages ni dobles sentidos: ¿seguirá Fernando Alonso en Ferrari? El máximo responsable deportivo de la escuadra italiana salió por la tangente, lo que, obviamente, ha generado una notable polvareda. Ese «sí», matizado con ese «de momento», no hace sino confirmar las sospechas que desde múltiples frentes están apareciendo: Alonso no está a gusto en Ferrari y quiere irse.
El asturiano está cansado de tener que decir cada jueves que no hay nada nuevo acerca de su futuro y que seguirá de rojo. Sin embargo, raro es el día que en los medios italianos no salgan informaciones que apuntan siempre hacia la misma realidad: Alonso se va. Este lunes, de hecho, en La Gazzetta dello Sport afirman que Alonso ya ha comunicado a los responsables de su equipo que no seguirá en Ferrari, ya que no han aceptado sus condiciones. El círculo más cercano a Alonso ha cerrado filas en torno a él, como siempre. Ni confirman ni desmienten, pero porque no quieren hablar en ningún sentido. En la Scuderia tampoco son claros en este aspecto, y el presunto topo que tienen sigue filtrando las píldoras que quieren a los medios. Y mientras ni materializan la renovación, ni dicen nada que no sea «circulen, aquí no se les ha perdido nada».
Cambios en Ferrari
En Maranello pueblo se respira un ambiente de cambios. Al lado de la vieja sede donde Enzo Ferrari comenzó el imperio rojo se está construyendo la nueva casa de la Gestione Sportiva, algo así como un centro de mando para la escudería de Fórmula 1 y para las múltiples competiciones en las que Ferrari está representada en el mundo de los GT's. Entre la fábrica y la nueva sede, aún por construir, está el museo, donde los visitantes pueden empaparse de la larga historia de éxitos deportivos y comerciales que abundan en la vieja casa del cavallino. Fernando Alonso, por supuesto, está presente... pero en un segundo plano. Que nadie se espere grandes imágenes del español, o siquiera algún casco firmado. Ferrari, como él mismo dijo, es mucho más grande que cada uno de sus individuos.
Esas obras que están ya a punto de finalizar en la tranquila localidad cercana a Módena son un perfecto síntoma de lo que está ocurriendo en el equipo de Fórmula 1: como en cualquier reforma en casa, son molestas pero necesarias. En medio de ese ambiente han caído Stefano Domenicali (director de la escudería), Luca Marmorini (jefe de motores y electrónica) y el mismísimo Luca Cordero di Montezemolo (presidente). El primero y el último eran dos de los grandes apoyos con los que contaba un Alonso que se ve impotente ante una temporada que nuevamente cerrará en blanco.
Las salidas de Alonso
De hecho, Ferrari se está jugando irse sin victorias en el 2014, algo que no ocurría desde principios de los 90. Ante este contexto, a Alonso sólo le quedan dos salidas: seguir en Ferrari para apurar sus últimos años de Fórmula 1, o jugársela en un equipo nuevo -o ya conocido, como es McLaren- pero con opciones de mejora. Sea como sea, lo que ha vivido en estos últimos años será totalmente distinto a lo de los próximos. Ferrari será otra, con nuevo presidente y nuevos responsables. Los nuevos aires, aún está por ver que sean mejores, que soplarán en Maranello pueden ser el acicate perfecto para un Alonso al que la ilusión se le agota poco a poco. Volver a McLaren, de donde salió piafando, es la mejor alternativa posible, sobre todo por la esperanza que supone el interés que ha puesto Honda en él.
Decida lo que decida, sólo Fernando Alonso sabe a ciencia cierta dónde pilotará en el 2015. Por muchos rumores, filtraciones, informaciones y declaraciones que se lean o emitan, es el asturiano el que tiene la llave de su futuro, y se ha ganado a pulso ser el dueño de su destino. Mientras tanto, en Ferrari seguirán desojando el calendario pensando que, quizá, el año que viene sea mejor... con Alonso o sin él.