El coruñés debutó como ayudante de Seedorf y Kluivert en un partido de Camerún contra las islas Comoras
31 mar 2019 . Actualizado a las 20:00 h.De Riazor a las islas Comoras hay solo un salto, el que dio Pablo López (A Coruña, 1977) para formar parte del cuerpo técnico de la selección de Camerún. El entrenador recibió la llamada de Seedorf, con el que había trabajado en el primer equipo del Deportivo en la recta final de la pasada temporada, para integrar junto a él y Kluivert el grupo de trabajo que sueña con ganar la próxima Copa de África. «Desde el punto de vista personal es una experiencia muy recomendable y muy buena, pero muy dura también por estar lejos de la familia y por lo que ves allí alrededor del fútbol. En el plano deportivo, impresionante, porque participas en un partido oficial de la Copa de África, con una selección como Camerún, que es la más importante por historia del continente, con siete mundiales y jugadores con mucho talento. Y como cuerpo técnico, increíble, con Seedorf y Kluivert, dos superestrellas del fútbol a nivel mundial, dos de los mejores jugadores de la historia, y que una vez traspasas el círculo de cercanía son muy humildes, siempre están pendientes de ti y trabajas en un ambiente fantástico», explica de vuelta a A Coruña.
Fue la primera experiencia de López con Kluivert, con el que nunca había coincidido en persona, aunque sí en varias reuniones previas por videoconferencia. «Kluivert y Seedorf se compaginan muy bien. Kluivert tiene mucho talento para ver el fútbol, lo ve muy rápido sobre todo en la zona de ataque, donde jugaba, lo ve muy rápido tanto en entrenamientos como partidos, y luego es muy humilde y afable, muy simpático con todos, y sorprende mucho que la gente de este nivel tenga esa humanidad tan grande», añade.
Estrellas del fútbol europeo
El entrenador coruñés, que en Camerún participa, como había hecho en el Dépor, del trabajo de campo en los entrenamientos, así como del análisis de vídeo a través de Adestrapp del propio equipo y del rival, destaca el potencial de una selección en la que participan algunas de las estrellas más importantes del fútbol europeo. «Están Choupo-Moting, que acaba de fichar por el PSG, Aboubakar, del Oporto, Ekambi, que ha llegado al Villarreal, Onana, el portero del Ajax, pero sobre todo destacaría la humildad de todos ellos, un grupo muy bueno con unas ganas enormes de aprender y mejorar», señala. El primer partido del nuevo proyecto que capitanean los tres técnicos en la selección camerunesa comenzó en Comoras, unas pequeñas islas del Índico a medio camino entre Madagascar y Mozambique, donde Camerún sumó un empate (1-1). «Era un campo de hierba sintética, en el que botaba muchísimo el balón y al principio yo sabía que nos iba a costar: a gente que viene de jugar la Champions la metes en un campo así, con mucho calor, la gente en las vallas... No sé cuánta gente había, pero igual en un campo para 4.000 aficionados, había 15.000 sin exagerar», relata.
Al margen del fútbol, Pablo López habla de un continente marcado por la pobreza. «Para este partidos nos entrenamos en Kenia y cuando ibas al campo pasábamos por zonas muy deprimidas, con la gente en la calle caminando de un lado para otro, ríos contaminados, muy duro en ese aspecto», afirma, antes de revelar una anécdota que les pasó ya en Comoras, de camino al campo de fútbol. «Íbamos en el autobús unos 50 kilómetros por carreteras de tierra volcánica y pasamos al lado de un terreno pegado al mar con dos porterías y en el que jugaban unos niños, y cuando nos vieron pasar vinieron todos. Seedorf y Kluivert se acercaron a la ventanilla para saludarlos, todos querían darles la mano. Impresionaba. Es una experiencia muy buena para madurar y de darse cuenta de la suerte que tenemos», afirma.
Camerún, que volverá a concentrarse el 6 de octubre para jugar contra Malaui y seguir con sus partidos previos a la Copa de África, en la que es anfitrión y ya está clasificado, tiene el reto de ganar esta competición. «Nunca lo consiguió y ese es nuestro objetivo a medio plazo. Ahora queremos formar un buen grupo, porque hay muchos jugadores de talento», añade, antes de comentar que Seedorf sigue la actualidad del Dépor: «Él sabe y está pendiente de sus exequipos, sabe cómo va el Deportivo y qué se dice, está al día continuamente, es una persona con una capacidad de trabajo sobrenatural. Sabe de los jugadores y de la gente del cuerpo técnico dónde está cada uno».