Marc Márquez y Jorge Lorenzo, que acumulan 12 mundiales, presentan la nueva Honda RC213V con la que buscarán ganar el título de motoGP en su primera temporada como compañeros
23 ene 2019 . Actualizado a las 20:16 h.El equipo Repsol Honda está de estreno. La marca alada presentó en el Campus Repsol de Madrid la nueva RC213V con la que los dos pilotos españoles disputarán el Mundial de motoGP. Además, lo harán en un año muy especial para Honda y Repsol, ya que buscarán aumentar los títulos que acumula la marca japonesa y celebrar los 25 años de unión entre ambas compañías, en los que han conseguido 14 títulos de pilotos, 168 victorias y 427 podios en la máxima categoría del Campeonato del Mundo de Motociclismo (500cc y motoGP). Casi nada.
Para hacer campeona a la nueva RC213V, Honda ha elegido a dos pilotos que suman doce Mundiales entre las tres categorías. Marc Márquez, actual campeón del mundo de motoGP y piloto made in Honda, tendrá un nuevo compañero en Jorge Lorenzo. Dos gallos en el mismo corral, dos pilotos campeones de ocho de los últimos nueve títulos de la categoría reina y dos deportistas con personalidad propia. «Es la ley del motociclismo», recuerda Márquez antes de dejar claro que «el primer rival es el compañero de equipo porque tienes las mismas armas y el mismo material. Nos ayudaremos muchas veces sin saberlo y eso será bueno para la moto y para incrementar la velocidad en la pista, que es donde el gallo se tiene que ganar el respeto», aseveró.
De la misma opinión es Jorge Lorenzo, que recordó que «ya he compartido box con Valentino Rossi, Ben Spies, Andrea Dovizioso y ahora con Marc, pero la situación es parecida» a cuando empezó en el 2008 en motoGP, «con un Valentino que quería volver a ganar tras no hacerlo en el 2006 y el 2007». «Ahora llego al box del campeón, que conoce muy bien la moto y es fuerte», reconoció. El piloto mallorquín insistió en que hablar de «dos gallos en un gallinero saca más lo negativo que lo positivo», porque tener «dos pilotos fuertes y campeones hacen crecer al equipo, hace evolucionar, que el otro piloto no se relaje y de más de sí en pista y fuera. El pique que podemos tener es algo natural. Esta rivalidad nos hará ser mejores», finalizó.
Importantes lesiones
Pero el año no va a resultar sencillo, al menos en la primera parte de la temporada por culpa de las lesiones de ambos. Márquez fue operado del hombro izquierdo el pasado mes de diciembre y todavía no está al cien por cien. «Estoy bien y ya empieza a carburar el tema», decía con su eterna sonrisa el actual campeón del mundo. «Ha sido un invierno atípico por el hombro y el más aburrido de mi vida» reconocía Márquez. «El hombro estaba peor de lo que esperábamos y fue una operación bastante agresiva. No llegaré al 100 %, pero intentaré estar lo más cercano a esa cifra en la primera carrera de Catar».
Mientras, Jorge Lorenzo pasó el lunes por el quirófano por una fractura en el escafoides de su muñeca izquierda tras una caída haciendo dirt track cerca de Verona y esperan que esté listo para los test de Sepang y la primera prueba del Mundial en el circuito de Catar. «No esperaba lesionarme hace tres días, pero son situaciones que no puedes cambiarlas y es mejor afrontarlas en positivo» decía el piloto mallorquín. «Es un hueso complicado y en Sepang no estaré, pero para llegar al test de Catar había que hacer la operación».
Los colores de Repsol Honda
Sobre su llegada al equipo Repsol Honda, Lorenzo confesó estar «encantado», «Me sientan bien los colores que demuestran muchas victorias y campeonatos. Este equipo es otro nivel», Añadió. «He tenido la suerte de estar en otros equipos muy ganadores, pero llegar a este equipo es otro nivel en todos los sentidos. Es uno de los sueños de cualquier piloto y lo he cumplido un poco tarde, con 31 años, pero puede ser una ventaja por la experiencia», confesó.
Y al hablar de objetivos para esta temporada, los dos pilotos fueron claros: «Luchar por victorias, por podios y por el campeonato», señaló un Márquez al que lo de dream team, por aquello de los 12 títulos que acumulan entre los dos, no le gusta. El catalán no mira el palmarés suyo ni el de su vecino de box, consciente de que poco importará eso el próximo 10 de marzo en Catar cuando se apague el semáforo y arranque oficialmente la temporada. «No me gusta lo de dream team», aclara. «Eso se verá a final de año y si se ha cumplido en la pista. Estar en este equipo exige luchar por victorias, podios y el campeonato. Los resultados son los que mandan», zanjó. «Para mí es un orgullo coger la Honda», señaló Lorenzo antes de coincidir con su nuevo compañero de equipo: «Ese dream team hay que demostrarlo con resultados en la pista».