La evolución que nunca llega

José Manuel Pose

DEPORTES

Ramón Leiro

05 dic 2020 . Actualizado a las 23:03 h.

El partido me pareció un desastre. Estamos esperando semana a semana una evolución que nunca llega. Escuchamos ruedas de prensa y cada vez se parece menos lo que se dice a lo que pasa. Ya no hablo de gustos futbolísticos y me centro solo en el rendimiento colectivo. Excluyo a una parte importante de los jugadores, que rinden casi todos a su nivel, pero metidos en el funcionamiento del equipo se ve mermado su rendimiento y el resultado es muy pobre. Vi a Borges con la selección hace unas semanas y me encantó; lo veo con el Dépor y me parece un jugador limitado. Sirva solo como un ejemplo, ya que podríamos hablar de más.

Un equipo que se adelanta en el marcador de forma manifiestamente injusta, como lo hizo el Deportivo en uno de los pocos balones que le llegaron de manera clara a Rolan, no puede ser que tan solo tres minutos después conceda el empate naufragando en lo que este conjunto manifiesta como una de sus fortalezas. Queda demostrado que el equipo, como tal, no está haciendo sus deberes.

Puede parecer sorprendente decir esto de un Deportivo líder con solo dos goles encajados. Pero es líder en una liga de proximidad, no en una liga real. Comento esto desde la preocupación que me producen el horizonte de la segunda fase y las eliminatorias directas posteriores, pensando además en la mentalidad que pueden tener ahora mismo los jugadores en relación a lo que potencialmente pueden hacer y lo que están manifestando.