Fuentes del grupo sostienen que una venta por separado de las cuatro vías gallegas era «poco rentable»
26 sep 2008 . Actualizado a las 02:00 h.A las autopistas gallegas parecen quedarles solo unas horas para cambiar de manos. Los bancos de mediación a quienes Sacyr Vallehermoso encargó la venta de Itínere, la filial concesionaria de la que dependen tanto Audasa como Autoestradas de Galicia, podrían haber cerrado ayer las negociaciones con éxito. A media tarde se filtró un posible acuerdo de compra a favor del banco neoyorquino Citigroup, que hoy mismo podría hacerse público.
La intención, según admitieron fuentes próximas a la negociación, es que el traspaso del 100% de Itínere garantice el oxígeno financiero necesario para que Sacyr no se vea obligada a desprenderse de su 20% en Repsol, un paquete sumamente rentable y que la cúpula de Sacyr sigue considerando un último recurso. La constructora está acorralada por una deuda de 18.300 millones de euros y por vencimientos a muy corto plazo para los que ahora mismo no habría tesorería suficiente.
Ayer se conoció que la petrolera francesa Total ha encargado preparar una oferta por las participaciones de Sacyr y de La Caixa en Repsol (un 20% y 12,7%, respectivamente), con la intención de adquirir luego un mayor porcentaje y hacerse con el control de la compañía. También la anglo-holandesa Shell estaría interesada en la puja.
Solo la participación de Sacyr en Repsol tendría un precio de partida muy próximo a los 6.525 millones de euros. Pero según aseguraron distintas fuentes, la compañía de Luis del Rivero estaría muy interesada en salvar su negocio en Repsol (uno de los más rentables en la actualidad dentro del grupo), si la enajenación de otros activos, entre los que el principal sería Itínere, bastase para afrontar las deudas. Oficialmente, Sacyr comunicó a la CNMV que mantiene su intención de vender su porcentaje en Repsol y «otros activos». Pero el rumor sobre la venta de las autopistas cobró más fuerza que nunca y la Bolsa lo interpretó a su manera: la cotización de Itínere cayó un 3,26%, mientras la de Sacyr subía un 3,58.
Citigroup se negó a admitir que la compra de la filial que controla las autopistas gallegas esté cerrada. Junto al banco neoyorquino, la mayor empresa de servicios financieros del mundo, también se interesaron por Itínere la americana Goldman Sachs y la italiana Atlanta.
Aunque se especuló con la posibilidad de que las autopistas gallegas (que son casi el 30% del negocio de Itínere) pudieran venderse por separado, Sacyr prefiere deshacerse del 100% de su filial concesionaria, pese a que mantiene abierto otro cuaderno de venta por el 40% de la sociedad. Fuentes de Sacyr descartaron que la firma haya escuchado ofertas por Audasa, cuya valoración podría rondar los 1.000 millones (presentó 1.630 millones en activos en el 2007, con 688 de deuda). Según admiten, esta operación descapitalizaría demasiado Itínere y haría muy difícil una venta posterior de la compañía.
Mediabanca y Merrill Lynch gestionan las ofertas por Itínere por encargo de Sacyr, mientras que el Dresdner Bank lo hace con el 20% de Repsol.