Rajoy y Monti, reunión hoy en Madrid, con la vista puesta en Fráncfort
ECONOMÍA
Todas las miradas están hoy puestas en el presidente del BCE y, muy especialmente, las de España e Italia, los dos países que lo han obligado a irrumpir en escena después de que sus primas de riesgo se hayan descontrolado poniendo en peligro el futuro de la moneda única. Sus máximos dirigentes, Mariano Rajoy y Mario Monti, estarán juntos en Madrid justo a la hora en la que Draghi comunicará las decisiones adoptadas en el consejo de gobierno para aliviar la insoportable presión de los mercados sobre la deuda española e italiana. Entonces llegará su momento de responder a esta ayuda.
La expectación es enorme. Incluso se especula con que, tras la actuación del BCE, Rajoy y Monti pedirán de forma conjunta la ayuda del fondo de rescate. Es más, en medios extranjeros se dice que el primer ministro italiano viene a Madrid con la misión de vencer las resistencias del presidente español. Rajoy sostiene que la escalada de la prima de riesgo no responde a su falta de compromiso con la austeridad -acaba de aprobar un ajuste de 65.000 millones- sino a las vacilaciones de los socios del euro al dar pasos hacia una mayor integración con unión bancaria y fiscal. Por eso considera que es el BCE el que debe actuar, sin ninguna exigencia para España y, según fuentes de toda solvencia, esperará a ver el alcance de las decisiones que se adopten hoy, para dar el viernes una respuesta.
De hecho, ayer mismo anunció que mañana hará un balance del curso político tras el Consejo de Ministros.
El líder italiano, por su parte, se desplazó ayer a Finlandia, donde arrancó un importante apoyo para que se intervenga en los mercados. El primer ministro Jyrki Katainen, uno de los socios más exigentes, admitió que los parqués «no están funcionando correctamente». «Una vez que los países han hecho los deberes, las medidas adoptadas deberían tener un efecto inmediato sobre sus primas de riesgo, lo que no está ocurriendo», concedió. Pese a su inesperado respaldo, Katainen se opone al uso intensivo del fondo de rescate para comprar deuda porque se quedaría «muy pronto sin dinero». El líder finlandés evocó la idea que más cuerpo ha cobrado para proteger a España e Italia. Espoleada por el propio Draghi, consistiría en que el fondo de rescate forme tándem con el BCE para comprar deuda.
Presión de Estados Unidos
Mientras tanto, el secretario del Tesoro norteamericano, Timothy Geithner, reclamó que se eviten nuevos retrasos y abogó por dar los pasos necesarios para aliviar la tensión sobre España e Italia, dos países en pleno «proceso de reformas». Geithner se reunió el lunes con Draghi para transmitirle personalmente su punto de vista. EE.?UU. ve los problemas en Europa como una amenaza creciente para su economía, que sigue sin arrancar.