El Fondo de Rescate comprará deuda al Tesoro y el BCE, en el mercado
24 ago 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Rajoy todavía no está decidido del todo a solicitar otro rescate, el segundo tras el anunciado en junio para salvar a la banca. O eso al menos es lo que mantienen las fuentes oficiales. Pero, por si las moscas, España ya negocia con sus socios las condiciones que llevaría aparejadas ese nuevo salvavidas. Así lo aseguraba ayer la agencia Reuters -una auténtica biblia para los mercados-, que citaba tres fuentes anónimas próximas a las conversaciones que mantiene el Ejecutivo con varios de sus socios europeos.
En Bruselas dicen que no hay nada de eso. Que lo único que está discutiendo son los detalles del rescate bancario. Pero, cuando el 8 de junio Reuters adelantó que España solicitaría el salvavidas en la tarde del día siguiente, también lo negaban, lo mismo que el Ejecutivo.
Sea como fuere, lo que se está negociando, según Reuters, es el tipo de rescate con el que ya contábamos: una compra de bonos a gran escala que consiga meter en cintura los inasumibles costes de financiación a los que se ve ahora abocada España. Se instrumentaría de la siguiente forma: el Fondo de Rescate compraría deuda directamente al Tesoro y el BCE lo haría en el mercado secundario, donde se negocian los títulos ya emitidos por el Estado.
Aún se desconoce la cuantía de la ayuda
De lo que no hay pistas es de la cuantía de la ayuda. Todavía no circulan cifras en la mesa de negociación. Pero, pronto las habrá. Porque todo apunta a que el segundo rescate llegará en septiembre. Calcula el ministro de Economía que el Eurogrupo abrirá el debate sobre las condiciones de la ayuda llegará a mediados de septiembre (se reúnen el 14 y el 15), antes, el día 6, Con Merkel de visita en Madrid, el BCE habrá de poner las cartas sobre la mesa y explicar hasta dónde está dispuesto a llegar para poner freno a la sangría. Rajoy ya ha dicho que antes de mover ficha quiere saber cuáles son las armas que va a emplear la autoridad monetaria.
La constatación de las negociaciones permitió que la prima de riesgo española cerrara ayer por debajo de los 500 puntos, nivel que llegó a superar durante la sesión.