Las restricciones impuestas a las nacionalizadas han apretado el grifo
24 jul 2014 . Actualizado a las 12:38 h.Dijo el Gobierno que el rescate de la banca lo pagarían los bancos y que los contribuyentes no tendrían que poner «ni un euro». No ha sido así. De momento, se han quedado por el camino 26.000 millones de euros. Ni uno solo de ellos volverá a reposar en las arcas públicas. Son la mitad de los más de 53.000 millones que fueron a parar al saco de las ayudas directas a las entidades sufragadas con el dinero de los españoles.
También dijo el Ejecutivo que quería que la banca nacionalizada fuese ese motor del crédito que tanta falta hace para reactivar la economía. Tampoco ha sido así. Al menos, de momento. Lo dice el Banco de España. En un informe publicado ayer, el supervisor confirma que la falta de crédito desde las entidades que han estado hasta hace poco o todavía están en manos del Estado se ha agravado. Y hasta le pone cifra a ese fenómeno. Dicen los expertos de Linde que entre septiembre del 2012 y marzo de este año, el crédito a las empresas se ha caído un 20 % por culpa de los límites y ajustes impuestos a las entidades nacionalizadas. Y concluyen que la reestructuración bancaria ha reducido un 0,4 % el crédito en su conjunto.
Así fueron las nacionalizaciones y las principales subastas
NCG
Banesco sorprendió a todos. En diciembre del año pasado, el grupo venezolano se impuso en la pugna por el apetitoso bocado de Novagalicia. Ofreció 1.003 millones de euros y se hizo con la entidad gallega, que había sido nacionalizada en septiembre del 2011. Recibió 8.981 millones en ayudas. Como consecuencia de su nacionalización tuvo que deshacerse del Banco Gallego, vendido al Sabadell por 1 euro y de Evo Banco, la marca con la que operaba fuera del noroeste peninsular, al fondo estadounidense Apollo por 60 millones. Esta última operación fue la primera que reportó ingresos al FROB.
Banca Cívica y Banco de Valencia
Caixabank ganó la partida. En noviembre del 2011, el Banco de España intervino el Banco de Valencia. Recibió 5.498 millones de euros en ayudas. Un año después fue adjudicado a Caixabank por 1 euro. No fue esta la única adquisición protagonizada por la entidad catalana. En marzo de ese mismo año ya había comprado Banca Cívica por 977 millones, los mismos que había recibido en ayudas.
Bankia
La gran sacudida. La caída de Bankia -el gigante con pies de barro nacido de la fusión de Caja Madrid, Bancaja y otras cinco cajas de ahorros- nos puso definitivamente los pies en la tierra, demostrando lo podridos que estaban los cimientos de algunas entidades. Fue nacionalizada en mayo del 2012. Necesitó la friolera de 22.424 millones de euros para salir a flote. Todavía no se sabe qué pasará con ese dinero. Es de ilusos pensar que se recuperará todo. De momento el FROB ha vendido el 7,5 % por 1.304 millones, con una plusvalía de 301 millones.
CAM y Banco Gallego
En manos del Sabadell. En el proceso de reestructuración del sistema financiero patrio, la entidad catalana se ha hecho con la CAM, que le fue adjudicada por 1 euro y el Banco Gallego, por la misma cifra. La primera recibió 5.249 millones en ayudas; y el segundo, 245.
Unimm y Caixa Catalunya
Golpe de efecto del BBVA. La entidad que preside Francisco González acaba de dar un golpe en la mesa del sector financiero con su, para muchos inesperada, victoria en la pugna por Catalunya Banc. Pagará, como mucho 1.187 millones por una entidad que ha recibido más de 12.000 millones de dinero público. Antes, el BBVA ya se había hecho con Unimm por 1 euro. Este último recibió 953. Con la subasta de Catalunya Banc el Estado finiquita la adjudicación de las entidades nacionalizadas.