Un «rider» pierde 4.200 euros al año por trabajar como un falso autónomo

D. Casas REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

VALENTYN OGIRENKO

La Seguridad Social deja de ingresar 50 millones anuales

19 sep 2019 . Actualizado a las 19:26 h.

Las tres pes: «penosas, precarias y peligrosas». Así son las condiciones laborales de los rider -el término inglés que traducido a castellano se refiere a ciclistas, pilotos de motocicletas e incluso jinetes-; esos repartidores que circulan por las ciudades, grandes y pequeñas, y que nos traen a casa no solo la comida que encargamos a nuestro restaurante preferido a golpe de clic, sino prácticamente todo lo que se nos antoje.

En UGT le han puesto cifras al drama de los trabajadores de plataformas digitales como Glovo, Deliveroo o Uber. Porque ser rider tiene un coste. Y no solo para la salud por lo riesgos derivados del fuerte ritmo de trabajo al que se les somete para poder cumplir con los pedidos y a los peligros que entraña pasarse el día en carretera. También para sus bolsillos. Y es que, de acuerdo con los cálculos del sindicato -a partir de los datos de la patronal del sector Adigital-, los más de 14.000 repartidores que trabajan en España para estas plataformas, más de 500 en Galicia, pierden en torno a un 25% de su salario por funcionar como falsos autónomos. Traducido a dinero contante y sonante: unos 4.200 euros al año. La nómina media de un empleado que presta sus servicios en una plataforma digital de reparto está, según el sindicato, en 900 euros mensuales. Una Y eso asumiendo unos gastos de 450 euros relacionados con el trabajo, al que dedican unas 40 horas a la semana.

 El informe deja al descubierto la brecha que existe entre los emolumentos de estos repartidores y los de aquellos que trabajan al amparo del convenio del sector. Para calcularla han obtenido un media a partir de dos referencias: una más alta, que sería el salario de la categoría más asimilable a repartidor del convenio de hostelería (1.435 euros al mes), y otra que se corresponde con la categoría más baja de los trabajadores no cualificados del sector servicios con datos del INE (1.079 euros al mes). De esta forma, si los 14.337 trabajadores que prestan sus servicios a firmas como Glovo o Deliveroo hubieran estado en el régimen general, habrían recibido 60 millones de euros más al año.

De esta manera, quienes están al frente de este tipo de empresas digitales se ahorran 4.200 euros por persona en salarios al no hacerles un contrato estándar.

El roto va más allá

El roto que provocan estas compañías va más allá. El agujero no solo afecta a las nóminas de los trabajadores, sino al sistema de la Seguridad Social, que deja de ingresar 3.400 euros anuales por cada trabajador, un 65 % de las cotizaciones que les corresponderían como empleados por cuenta ajena, lo que supone una pérdida total de 50 millones de euros cada ejercicio.

Las plataformas digitales se ahorran un buen pico en salarios y cotizaciones A esa cifra se añaden otros 4.500 euros en transferencias de las cotizaciones por lo que «el uso indebido de la figura de trabajador autónomo está permitiendo a las plataformas digitales de reparto ahorrarse hasta 92 millones de euros al año en salarios y hasta 76 millones de euros al año en cotizaciones a la Seguridad Social», denuncia UGT por boca de su secretario de Política Sindical, Gonzalo Pino.

Tanto el coordinador de Turespuestasindical.es, Rubén Ranz, que ha colaborado en la elaboración del informe, como para Pino, los trabajadores de estas plataformas «no son emprendedores. La figura del autónomo es el instrumento que utilizan para funcionar bajo un modelo sin derechos laborales y con una serie de prácticas abusivas». Entre ellas, citan el hecho de que «vacaciones, enfermedad e incapacidad por accidente laboral no están contemplados para estos trabajadores».

Las plataformas digitales se ahorran un buen pico en salarios y cotizaciones