La inflación subyacente sube un 5,6 %, récord histórico en la eurozona

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

DPA vía Europa Press | EUROPAPRESS

El BCE se reúne de forma extraordinaria para analizar la situación en los mercados financieros

17 mar 2023 . Actualizado a las 11:51 h.

Los precios en la eurozona despidieron febrero un 8,5 % por encima del umbral anotado en el mismo período del 2022, según ha confirmado Eurostat. 

La inflación tan solo ha bajado una décima respecto al mes de enero y, lo que más preocupa a las cancillerías europeas: la subyacente (excluye productos frescos y energía) sigue al alza. Ha subido un 5,6 %, cifra histórica. Aunque los precios energéticos se moderaron al 13,7 % desde el 18,9 % de enero, los alimentos frescos se encarecieron un 13,9 % interanual, frente al 11,3 % del mes pasado.

Todo ello a pesar de que la inflación interanual de la eurozona acumula cuatro meses consecutivos de desaceleración -y excluyendo el efecto base, esto es, que la brecha poco a poco se irá reduciendo a medida que la comparativa se acerque a los meses de más presión inflacionista en el 2022-. Dicha cifra se situó en su nivel más bajo desde mayo del 2022, antes de que el Banco Central Europeo (BCE) comenzara a subir los tipos de interés.

En el conjunto de la Unión Europea (UE), la tasa de inflación interanual se situó en febrero en el 9,9 %, una décima por debajo de la subida de los precios en enero, lo que también supone la cuarta bajada mensual de la lectura de inflación.

Entre los países de la UE, las menores tasas de inflación se observaron en Luxemburgo (4,8 %), Bélgica (5,4 %) y España (6 %), mientras que las mayores subidas se registraron en Hungría (25,8 %), Letonia (20,1 %) y República Checa (18,4%).

Causas

El BCE señaló ayer que persisten problemas que pueden estar lastrando sus esfuerzos por domar la inflación. Por un lado, la permanencia de ayudas públicas desplegadas por los Gobiernos para hacer frente a la crisis energética y la pandemia. Su presidenta, Christine Lagarde, instó ayer a reducir al mínimo indispensable los escudos sociales. Por otro lado, también apuntó hacia las revalorizaciones salariales, de dos dígitos en muchos casos, y el aumento de los márgenes empresariales. La francesa ha reclamado más esfuerzos de contención para reducir la demanda y mantener a raya la inflación. 

La confluencia de estos tres factores en un entorno de alta liquidez, propiciado por el dinero barato que ha estado inyectando el BCE en la economía en los últimos años, despierta el temor a los bautizados como «efectos de segunda vuelta», esto es, que las medidas de apoyo orientadas a mantener la capacidad adquisitiva y la demanda, acaben desencadenando un problema mayor de alta inflación crónica.

El BCE prevé que la eurozona cierre el 2023 con una subida de los precios más moderad (5,3 %) que la prevista en diciembre (6,3 %). En el 2024, los precios podrían subir un 2,9 % y un 2,1 % en el 2025.  

Turbulencias financieras

El organismo decidió ayer mantener su hoja de ruta y subir medio punto los tipos de interés. El de referencia ya se sitúa en el 3,5 %. Eso sí, abrió la puerta a revisar sus planes en las próximas reuniones en función de cómo evolucionen los precios, especialmente los de los alimentos, y de las turbulencias financieras que han desencadenado las crisis bancarias del Silvergate, Signature Bank, Silicon Valley Bank, Credit Suisse y First Republic Bank

De hecho, este mismo viernes, el Consejo de Supervisión del BCE, con Andrea Enria al frente, se ha reunido de manera extraordinaria para examinar la situación en los mercados financieros y el sector bancario. Solo dos días antes pidió a los bancos de la eurozona que examinasen su exposición a la entidad suiza, ante su posible quiebra.

Ayer mismo Lagarde defendió la robustez de las cuentas de la banca europea, asegurando que, de haber problemas de liquidez, el BCE no dudará en salir al rescate. 

Este tipo de encuentros del supervisor, según apunta Europa Press, es algo habitual cuando se producen cambios muy rápidos en la situación y, según fuentes conocedoras, ya se habría reunido a principios de esta semana, después de la intervención en Estados Unidos de los bancos Silicon Valley Bank (SVB) y Signature Bank.