Tras semanas en mínimos, los carburantes vuelven a subir a las puertas del verano
ECONOMÍA
Gasoil y gasolina inician la escalada a una semana de la operación salida
25 jun 2024 . Actualizado a las 09:43 h.Las carreteras españolas calientan motores ya para la primera gran operación salida de este verano. Y lo hacen dejando una sensación agridulce para los conductores que estos días preparan sus coches para afrontar un viaje en carretera. Hace tan solo cinco días, fijarse en los registros que marcaban los monolitos de las gasolineras suponía encontrarse con precios mínimos de este 2024. Tanto la gasolina como el diésel marcaban un coste que no se había visto en todo el año. Algunas estaciones de servicio incluso ofrecían el litro de gasoil a 1,10 euros, una cifra que recordaba a tiempos previos a la pandemia.
Pero las gasolineras también calientan motores. Y la fiesta parece haberse aguado un poco porque este mismo fin de semana, los números empezaban a crecer. Eso sí, muy levemente.
El litro de gasolina se dispensaba ayer en Galicia a una media de 1,618 euros, lo que supone un desembolso de 80,9 euros para aquellos que quieran llenar por completo un depósito medio de unos 50 litros. En España, la cifra es bastante parecida, porque pertrechar un coche propulsado por este combustible requiere pagar al pasar por caja unos 80,5 euros.
Algo mejor lo llevan los propietarios de coches diésel. La semana del 10 de junio, el precio medio de este carburante en Galicia se situaba en mínimos anuales con una media de 1,467 euros el litro. Repostar entonces 50 litros requería hacer un esfuerzo de 73,35 euros. Este fin de semana, empezó su particular escalada y ayer el litro ya se situaba en los 1,494 euros. Con ese registro, repetir la operación supone pagar 74,7 euros, casi un euro y medio más que en la semana del 10 de junio.
Escasa diferencia con el 2023
Si se viaja un poco en el tiempo y se analizan los datos que de hace justo un año, a las puertas de la primera operación salida de aquel verano, las cifras difieren bastante poco. En el 2023, el precio de la gasolina estaba en España a 1,592 euros, algo más barata de lo que se vende ahora (1,611). Por aquel entonces, llenar el depósito suponía 79,6 euros.
El diésel también estaba algo más barato. Concretamente a 1,442 euros, lo que requería una inversión de 72 euros para pertrechar un coche de 50 litros. A día de hoy, aunque los precios vienen de unas semanas de mínimos anuales, el gasoil se sitúa en los 1,474 euros (unos tres céntimos más que en la misma semana de junio del 2023). Y con esto, repetir ese mismo llenado supone 73,7 euros, 1,6 euros más.
Las grandes diferencias vienen al comparar los días previos a la operación salida de julio de este año con los del 2022, cuando los carburantes alcanzaron sus máximos históricos obligando al Ejecutivo de Pedro Sánchez a tomar medidas para tratar de enfriar las facturas de los españoles. Por aquel entonces, el precio medio de la gasolina en España escalaba hasta los 2,116, casi cincuenta céntimos más que hoy en día.
Con este precio marcado en los monolitos, llenar un coche de gasolina en el 2022 suponía pagar 105,8 euros. Eso sí, el alivio llegaba gracias al descuento de 20 céntimos decretado por el Gobierno. Una vez aplicado, el esfuerzo al pasar por caja bajaba a los 95,8 euros. Aun así, la cuenta era bastante más abultada en aquel aciago verano comparado con la época estival en la que nos encontramos inmersos. Porque llenar el coche a día de hoy cuesta 15 euros menos que entonces.
También supone un chute de optimismo para los conductores de diésel comparar las cifras de hoy con las de aquel 2022. El litro de este combustible subía hasta los 2,089 euros en la semana del 24 de junio de hace dos años. Una vez aplicado el descuento de 20 céntimos, el precio se enfriaba hasta los 1,889 euros. Colmar el depósito de 50 litros exigía a los españoles pagar más de 94 euros entonces, casi 21 euros más que a día de hoy.
El jarro de agua fría llega si se viaja algo más en el pasado. Hasta el año 2020, en plena pandemia. Por aquel entonces, llenar un coche de gasoil con 50 litros costaba solo 52 euros, mientras que el de gasolina requería 57 euros.