«La mies es mucha», pero trataré de adaptarla al espacio: durante milenios, las bodegas españolas nacieron, crecieron y declinaron en silencio. Hoy la modernidad despendolada se ha infiltrado en el sector vitivinícola, y llegaron los edificios emblemáticos, las cuchipandas del ecoturismo y, ¿cómo no?, los famosos metidos a bodegueros. Pues bien, los hermanos José y Javier Moro, impulsores de la bodega y el vino Cepa 21 -un monovarietal de tinto fino, naturalmente moderno perteneciente a la D.O. Ribera de Duero- organizaron una flamante presentación de la nueva bodega-icono y el caldo homónimo el pasado 21 de junio, coincidiendo con la llegada del estío, invitando sin reparar en gastos («todo pago», que diría mi suegra) a medio millar de privilegiados, entre ellos Inmanol Arias, Ronaldo y otras celebrities , el señor presidente de la Junta de Castilla León -que intervino en los discursos, moderados por la modelo Sandra Ibarra- e infinidad de prohombres, cantantes, actores, escritores y periodistas. El vino en cuestión ha sido distinguido ya con una calificación de 91 puntos por el gurú yanqui Robert Parker, y el nuevo restaurante llamó la atención: escribiré acerca de él un día de éstos.