Un fenómeno no tan infrecuente

ESPAÑA

El Etna, el pasado mes de agosto
El Etna, el pasado mes de agosto ETNA WALK / MARCO RESTIVO

En el mundo hay casi 1.500 volcanes activos, una veintena de ellos en erupción ahora mismo, de los que cuatro se encuentran en Europa

26 sep 2021 . Actualizado a las 09:21 h.

Para que los científicos consideren activo un volcán tampoco es que haga falta mucho. Basta con que esa actividad se haya producido alguna vez en los últimos diez mil años. A partir de ese período, la ciencia lo considera extinguido. Así que el número de volcanes activos en el mundo es bastante importante: 1.356 según el Instituto Smithsonian de Estados Unidos. Afortunadamente, la inmensa mayoría de estos volcanes permanecen tranquilos y silentes, pero cada año se producen alrededor de 70 nuevas erupciones. Algunas breves. Otras no. Hay volcanes que llevan años vomitando lava mientras que otros hacen apariciones fugaces o emanan algunos gases antes de reiniciar el sueño. Ahora mismo en todo el mundo hay entre 25 y 30 volcanes en erupción, cuatro de ellos en Europa.

La actividad volcánica se ciñe en buena parte a lo que se conoce como el cinturón de fuego, un área que discurre por la costa oeste de América del Norte y América del Sur, la costa este asiática, Indonesia y Nueva Zelanda, zona donde convergen varias placas tectónicas. En realidad, este cinturón tiene forma de herradura y dibuja el perímetro del Océano Pacífico.

Uno de los últimos volcanes en entrar en erupción ha sido el Etna, en Sicilia. Ocurrió el pasado martes aunque el despertar de la vieja chimenea no produjo ninguna inquietud entre los sicilianos, acostumbrados a la actividad intermitente de uno de los principales símbolos de la isla. Al fin y al cabo, la anterior erupción se había producido tres semanas antes. En Italia también está en activo el Estrómboli, el volcán que ocupa una de las islas Eolias, en el mar Tirreno y que se mantiene al ralentí desde agosto del 2019. La última erupción violenta se produjo en 1930 y es uno de los atractivos de la isla, ya que puede visitarse e incluso se organizan excursiones nocturnas hasta casi la cima del cráter.

El otro volcán con actividad en Europa es el Fagradalsfjall, en Islandia, que es en realidad una fisura de un sistema volcánico. Arrancó su última erupción el 19 de marzo de este año. En este caso también se puede visitar. De hecho, los volcanes son uno de los reclamos que los visitantes buscan en Islandia. En cualquier caso, la actividad del Fagradalsfjall nada tiene que ver con la erupción del Eyjafjalla, que en 2014 obligó a cerrar el espacio aéreo en varios países. El estallido, subglaciar, provocó una nube de cenizas de tal altura e intensidad, que amenazó el discurrir de los aviones, susceptibles de ser abrasados en sus motores y en el propio fuselaje por los trozos de roca en suspensión que arrastraba la nube volcánica.

Seis zonas en España

En España también hay zonas con restos de actividad volcánica, más allá de las Canarias. Según el Instituto Geográfico Nacional, también hay señales en la comarca de La Garrocha (Gerona), el Cabo de Gata (Almería), el entorno de Cofrentes (Valencia), las Islas Columbretes (Castellón) y los Campos de Calatrava (Ciudad Real). Según el propio IGN «de entre todas ellas, solo se han registrado erupciones en los últimos 10.000 años en Girona y Canarias y de entre los dos lugares, las islas son las únicas que han lidiado con erupciones en épocas recientes».

Pese a los importantes avances en el control de la actividad volcánica, las erupciones todavía provocan grandes tragedias. En el Anak Krakatau, entre las islas indonesias de Java y Sumatra, un episodio eruptivo causó en diciembre de 2018 casi medio millar de muertos y en el Merapi, en la isla de Java, a finales de 2010 se contabilizaron casi 350 muertos. En el Fuego, en Guatemala, murieron 200 personas y desaparecieron otras 200 en un episodio ocurrido 2018.