Von der Leyen insiste en su idea de cooperar con la ultraderecha pese a las duras críticas de Scholz
ESPAÑA
La democristiana diferencia entre el grupo de Meloni e Identidad y Democracia
26 may 2024 . Actualizado a las 13:17 h.La presidenta de la Comisión Europea y candidata a la reelección, la alemana Ursula von der Leyen, insistió ayer en su idea de llegar a acuerdos con partidos de ultraderecha en el Parlamento Europeo, a pesar de las duras críticas recibidas, como las efectuadas por el canciller de Alemania, el socialdemócrata Olaf Scholz.
El político germano defendió desde Berlín que la Comisión Europea no debería apoyarse en la extrema derecha para su próximo mandato después de que la candidata a presidir de nuevo esa institución dejase la puerta abierta a colaborar con el grupo euroescéptico Conservadores y Reformistas Europeos (CRE). A este bloque pertenece, entre otros, el partido de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, Hermanos de Italia.
Von der Leyen, del Partido Popular Europeo, justificó que trabajó con Meloni «muy bien» en el Consejo Europeo. En cambio, sí descartó cooperar con la ultraderecha de Identidad y Democracia, que aglutina a Alternativa para Alemania, a la francesa Reagrupación Nacional y a la italiana Liga.
Feijoo y Meloni
El jueves, también el presidente del PP y correligionario de Von der Leyen, Alberto Núñez Feijoo, apoyó un posible pacto en Europa con la ultra Meloni, quien el pasado fin de semana participó en el acto de Vox en el que el argentino Javier Milei insultó a Pedro Sánchez y a su esposa. «No me parece homologable a otros partidos que se consideran de extrema derecha en Europa», reseñó el líder de la oposición española en Barcelona sobre Hermanos de Italia. Esa posición le costó a Feijoo la crítica de Sánchez, quien se mostró convencido de que el PP volverá a pactar con Vox. «Yo no sé en qué equipo juega Feijoo, pero no juega en el equipo de España. Eso es seguro», añadió.
Ya en abril, la política de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) avanzó que no descartaría cooperar con Conservadores y Reformistas Europeos. Puede necesitarlos porque la gran coalición histórica de socialdemócratas y democristianos, con la incorporación de los liberales y los verdes, peligra por el auge de las fuerzas radicales.
Scholz, quien admitió que le «entristece» la decisión de Von der Leyen, aseguró que su postura es clara: «Solo será posible establecer una presidencia de la Comisión basada en los partidos tradicionales. Cualquier otra cosa sería un error para el futuro de Europa». Pero la actitud de Von der Leyen busca que el previsible gran giro a la derecha en la Eurocámara no le dificulte seguir presidiendo la Comisión —necesitará la aprobación de una mayoría simple en el Parlamento Europeo— que dirige a los 27, pues puede que no sea suficiente el apoyo de los grupos más tradicionales.