El responsable de emergencias cree que el problema fue aprovechar el antiguo trazado

La Voz

FIRMAS

25 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Una de las personas que mejor conocen la problemática de la autovía A-55 es Rodrigo Iglesias Fernández, encargado del servicio de emergencias de Mos y coordinador del equipo de voluntarios de Protección Civil. En su opinión, el principal defecto que tiene esta autovía es haber querido aprovechar el sinuoso trazado de la antigua carretera nacional, una idea que se ha cobrado muchas vidas hasta que se aprobaron nuevas limitaciones de velocidad. Señala que, afortunadamente, desde los últimos años se ha reducido el número de accidentes mortales y la mayor parte de las colisiones solo se saldan con daños materiales o con heridos leves. Destaca que la colaboración ciudadana fue muy importante en los momentos de mayor siniestrabilidad y que hoy en día la respuesta de los servicios de emergencia es muy rápida. «Destacaría la celeridad con la que trabaja la Guardia Civil en este tramo. Saben que es conflictivo y cuando se produce un accidente, acuden en cuestión de minutos», afirma.

Túnel

Una de las propuestas lanzadas por el gobierno municipal de Mos es la posibilidad de crear un gran túnel por el que dirigir la autovía a su paso por esta localidad. De esta forma, se mejoraría la calidad de vida de los barrios atravesados por la actual calzada y la seguridad de los conductores. La ministra de Fomento, Ana Pastor, asumió esta petición y en una visita que realizó el año pasado al Concello de Mos avanzó haber encargado un proyecto técnico. La administración local negocia con la Xunta y Fomento cómo será el futuro diseño de dicho trazado alternativo, que el gobierno municipal deberá de contemplar en su futuro Plan Xeral.