La universidad arranca hoy el curso estrenando cinco nuevas carreras

Tamara Montero
tamara montero SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

PACO RODRÍGUEZ

El 5 vuelve a ser la nota mínima para tener beca y se abaratan los másteres habilitantes

03 sep 2018 . Actualizado a las 19:38 h.

Será un curso distinto el que hoy comienza en la universidad gallega. Distinto porque con la llegada de los nuevos universitarios a las facultades arranca la maquinaria de cinco nuevas carreras en la comunidad. Los que se incorporarán antes serán los primeros estudiantes de Enxeñería Biomédica, el nuevo grado de la Universidade de Vigo, que ha marcado el inicio del curso universitario hoy mismo. El lunes que viene les tocará a los universitarios que han optado por estrenar los grados de Xestión da Moda en Ferrol, Biomedicina y Criminoloxía en Santiago y el primer grado interuniversitario de Galicia: Paisaxe, que comparten las universidades de A Coruña y Santiago. En total, alrededor de 50.000 estudiantes se incorporarán entre esta semana y la que viene a las aulas universitarias. Unos 11.000 lo harán por primera vez.

Cinco son nuevos en la oferta -en realidad cuatro, porque Criminoloxía es un título propio de larga tradición en Santiago que ahora pasa a ser oficial- y otro desaparece. Este curso inicia el camino de la extinción el grado en Xeomática e Topografía que se imparte en el campus de Lugo. Forma parte de la reestructuración del mapa de titulaciones entre este curso y el curso 2020-2021. Ya no se ofertó a los nuevos estudiantes, como el próximo año dejará de haber estudiantes de primero en Ciencias da Cultura, Xestión de Pemes y Lingua e Literatura Españolas en el campus de Lugo de la USC, y de Humanidades, Información e Documentación y Enxeñería Eléctrica en Ferrol.

A la reestructuración de los grados de este año hay que sumar los cambios en otra oferta, la de másteres, caracterizada por la volatilidad y la rápida adaptación a las necesidades del mercado laboral. Las tres universidades comienzan este curso a impartir 14 másteres nuevos, que además vienen marcados por la colaboración entre instituciones académicas. En algunos casos, como los de Biodiversidade Terrestre, Economía e Investigación e Innovación en Didáctica para Educación Infantil e Primaria colaboran las tres universidades gallegas. En otros casos, como el máster de Ciberseguridade o el de Xenómica e Xenética, implica a dos de las tres instituciones.

Los posgrados traen además otra novedad este curso a Galicia, y es el abaratamiento de los precios. El precio de los que tienen carácter habilitante -es decir, es obligatorio cursarlos para poder ejercer una profesión- se ha igualado al coste del crédito de un grado. La primera matrícula en un máster como el de abogacía tiene este curso un coste de 890 euros, y el de ingeniería de montes cuesta alrededor de 1.400 euros.

En el resto de posgrados, el coste sigue siendo superior. Así, en el caso de los posgrados experimentales -de ciencias, ciencias de la salud e ingenierías- el coste del crédito se sitúa en 31,36 euros en primera matrícula, con lo que, aprobando todo a la primera, hay que abonar unos 1.900 euros. En el caso de los másteres de ciencias sociales y humanidades el coste del crédito está en 21,61 euros, con lo que el curso completo en primera matrícula supone un desembolso de 1.300 euros.

Regreso al 5

Lo que es este curso relativamente más sencillo es obtener una beca del Ministerio de Educación. Al menos para los que se incorporan al sistema universitario. El decreto de becas de este año vuelve a poner el listón en el 5 de nota mínima para poder obtener la ayuda de matrícula para aquellos que se matriculan por primera vez. Desde el 2012, cuando el ministro José Ignacio Wert decidió modificar el sistema de reparto de becas, la nota mínima estaba en un 5,5, con lo que cada año alrededor de 70.000 estudiantes, según los cálculos de la Conferencia de Rectores, se quedaban sin beca.

Eso sí, para poder obtener cuantías más allá del pago de la matrícula de ese curso habrá que tener una nota mínima de 6,50. También se siguen fijando notas y créditos que hay que aprobar para seguir teniendo beca durante los cursos posteriores, y continúa teniendo una parte fija y una de carácter variable. Además, se ha creado un complemento específico para aquellos estudiantes con buenas notas. Los que tengan un expediente superior a 8 tendrán una ayuda extra de entre 50 y 125 euros.

Llega el fin de la convocatoria de septiembre: la selectividad se adelanta a julio

Los cambios afectan este año también a los estudiantes de secundaria. Hace dos años estrenaban las nuevas pruebas de acceso a la universidad, no faltas de polémica -no se supo con seguridad cómo iban a ser hasta bien avanzado el curso-. Este año, por fin acompasan sus calendarios con los que rigen en la enseñanza superior desde la implantación del conocido como Plan Bolonia: la convocatoria extraordinaria de las pruebas de acceso a la universidad dejará de celebrarse en septiembre para tener lugar en julio.

Este curso las cosas serán distintas. La prueba de acceso llevará el mismo calendario que los exámenes de las universidades, que desde hace años celebran sus convocatorias extraordinarias en julio para así poder iniciar las clases en septiembre. ¿Qué significa? Que se adelantan los plazos y en el mes de agosto todos los nuevos universitarios deberían tener asignada su plaza. Facilita no solo la incorporación a las aulas en septiembre, sino toda la logística necesaria: la búsqueda de piso o de residencia, el traslado...

¿Consecuencias? La primera, que este año es el último en el que cientos de universitarios empiezan a estudiar la carrera con semanas de retraso, en algunos casos más de un mes. La convocatoria de septiembre está fijada para los días 12, 13 y 14. Las notas definitivas no saldrán hasta el 1 de octubre, y después se abrirán dos plazos de inscripción en las carreras que todavía tengan plazas vacantes. Es decir, los últimos inscritos no empezarán a ir a clase hasta mediados de octubre, en un sistema que tiene como piedra angular la evaluación continua, con lo que no es la primera vez que hay alumnos que ya aterrizan en la universidad con asignaturas suspensas antes de empezar. Se han perdido prácticas y entregas de trabajos fundamentales para aprobar.

Mañana se hará público un nuevo listado de admitidos, el penúltimo antes de la celebración de la selectividad de septiembre. Hasta el momento, 77 grados ya han cerrado su matrícula de nuevo ingreso, lo que significa una ocupación en el sistema universitario de Galicia por encima del 80 %. Con todo, aún hay plazas libres en más de 90 carreras en los siete campus de la comunidad.