El menor del crimen de la maleta ocultó el cadáver de su madre e hizo vida normal por Foz
GALICIA
El Juzgado de Menores ordenó el ingreso del joven, acusado de matar el pasado sábado a su madre en Foz, en un centro especializado en régimen cerrado
06 nov 2019 . Actualizado a las 08:39 h.El menor de edad acusado de matar el pasado sábado a su madre, Minaene Franco, de 36 años, en una vivienda de Foz y posteriormente introducir el cadáver en una maleta y ocultarlo en un armario, pasó ayer a disposición de la Fiscalía de Menores de Lugo, que pidió su internamiento en régimen cerrado en un centro de menores, a lo que accedió la jueza de Menores de la ciudad. Una patrulla de la Policía Autonómica trasladó al joven a ese centro.
El joven, de 17 años, mató presuntamente a su madre el sábado tras asestarle numerosas cuchilladas en el rostro y otras partes del cuerpo. Las propinadas en el pecho son las que podrían haberle causado la muerte. Posteriormente, introdujo el cadáver de su madre en una maleta y lo escondió en un armario, posiblemente para evitar el contacto visual con el cuerpo y seguir haciendo vida normal. Fruto del forcejeo, el joven resultó herido en una mano, con un profundo corte por el que sangraba abundantemente y por el que acudió a un centro médico para recibir asistencia.
Después hizo vida normal por Foz, entrando en varios bares de la villa, recargando la tarjeta de su teléfono móvil e iniciando con integrantes de un equipo de fútbol de A Mariña una noche de copas. El joven no trabajaba y estaba matriculado en un curso, pero no asistía prácticamente a clase.
El domingo por la noche, después de que Minaene Franco llevase días sin responder a llamadas de teléfono ni a wasaps, una conocida de la mujer se presentó en su casa. Según indicó, llamó al timbre desde el portal y el menor le abrió la puerta que da acceso al edificio. Una vez en la puerta de la vivienda vio gotas de sangre y alertó a los servicios de emergencias. Otro testigo manifestó que vio al hijo de la asesinada en un parque de la localidad con la mano ensangrentada y que este le dijo que había hecho «algo».
Un amigo de la mujer fallecida indicó que el presunto homicida era retraído, de pocas palabras y que daba portazos en casa. Aseguró que el pasado jueves estuvo con Minaene y que ella bajó de su casa llorando y disgustada por los problemas que tenía con su hijo.