El balance consolidado de la DGT confirma el aumento de fallecidos en vías urbanas frente al descenso en las interurbanas
07 ago 2020 . Actualizado a las 13:15 h.El balance consolidado de accidentes de tráfico del año 2019 confirma el aumento de los siniestros mortales en zonas urbanas frente al descenso experimentado en carretera. Este último balance de la Dirección General de Tráfico incluye las muertes en ciudad y en travesías y las ocurridas dentro del mes siguiente al siniestro, y revela que en las ciudades se produjeron el 30 % de las muertes.
Los datos consolidados, con 1.755 muertes (127 en Galicia), muestran un descenso general del 3 % respecto al año 2018, aunque la evolución ha sido muy diferente dentro y fuera de las ciudades. En las vías interurbanas españolas hubo 1.236 fallecidos, un 6 % menos que en el año anterior, pero se registró un repunte en la siniestralidad urbana, donde perdieron la vida 519 personas, un 6 % más que en el 2018. En referencia al descenso de accidentalidad mortal en carretera, la DGT lo vincula con la reducción del límite máximo de velocidad en toda la red de vías convencionales de doble sentido, que pasó de 100 a 90 kilómetros por hora.
El director general de Tráfico, Pere Navarro, ya advirtió que se estaba produciendo un aumento del número de víctimas en las ciudades, y por eso insiste en la necesidad de que el Gobierno apruebe cuanto antes el decreto de medidas urbanas que reduce el límite máximo de velocidad, de 50 a 30 por hora, en buena parte de las calles de los cascos urbanos. Ese calmado del tráfico en el ámbito urbano es el objetivo principal de la DGT, pero muchas ciudades, entre ellas las gallegas, ya han tomado nota y están creando calles 30 sin esperar a que se apruebe la normativa estatal. Los estudios indican que en un atropello a 30 kilómetros por hora, la probabilidad. «Estos datos nos indican que vamos a tener que concentrar los esfuerzos en las ciudades y, en especial, en la protección de los usuarios vulnerables», alerta el director de Tráfico.
Menos muertes en Galicia
En Galicia, el balance consolidado eleva a 127 el número de muertos en accidentes de tráfico en el 2019, lo que supone 37 fallecidos más que en el listado provisional realizado a final de año, que no incluía accidentes urbanos ni muertos después de las 24 horas siguientes al siniestro. En todo caso, la cifra es menor que la del 2018, cuando perdieron la vida en Galicia 144 personas, 40 más que en el balance de 24 horas hecho solo con víctimas de vías interurbanas. Galicia se encuentra entre las comunidades que han registrado descensos en el balance consolidado de víctimas mortales. Los fallecidos también bajaron en Aragón, Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Extremadura, Murcia, Navarra y Comunidad Valenciana.
Radiografía de la siniestralidad
En el 2019 hubo más víctimas vulnerables que nunca. Los mayores incrementos de siniestralidad se produjeron entre los ciclistas (80 fallecidos en el 2019, frente a 58 en el 2018) y los motoristas (466 muertos, incluidos ciclomotores, un 11 % más que en el 2018), si bien por causas diferentes. Mientras el incremento de ciclistas muertos se concentró en vías urbanas (32 fallecidos en el 2019, frente a 15 en el 2018), el de motoristas lo hizo en vías interurbanas (318 fallecidos en el 2019, frente a 276 en el 2018). La cifra de motoristas fallecidos es la más alta desde el 2010, mientras que la de ciclistas es la más alta desde el 2007. Entre el resto de medios de desplazamiento, destaca la reducción del 12 % de las personas fallecidas ocupantes de turismos.
Peatones
No descienden las cifras de víctimas mortales. En el 2019 fallecieron 381 peatones, frente a 386 del 2018. En conjunto, los usuarios vulnerables (peatones, ciclistas, motoristas) suponen por primera vez más de la mitad de las personas fallecidas (en concreto, un 53 %).
Más muertos entre 45 y 64 años
Las personas de 65 años y más, que suponen el 19 % de la población, representaron un 28 % de las víctimas mortales. Cabe destacar que las reducciones que se han producido en la franja de edad comprendida entre los 15 y los 44 años, y los aumentos registrados en la franja de 45 a 64 años.
Vías interurbanas
Se ha producido una reducción del 10 % de las víctimas mortales en carreteras convencionales. Los accidentes mortales más frecuentes en este tipo de escenario siguen siendo las salidas de vía (un 41 % de las personas fallecidas) y las colisiones frontales (un 27 %). En vías interurbanas, destaca el incremento de la siniestralidad de motoristas, que supusieron 1 de cada 4 personas fallecidas. En conjunto, los usuarios vulnerables suponen un 40 % de las víctimas mortales en vías interurbanas. Las víctimas mortales dentro de turismos disminuyeron un 13 %, situándose en 579 personas fallecidas.
Vías urbanas
Los usuarios vulnerables de las vías urbanas supusieron el 82 % de los fallecidos, repartidos del siguiente modo: 247 peatones, 32 ciclistas, y 148 motoristas (incluidos ciclomotores). En todos los casos se produjeron aumentos respecto al 2018. El 70 % de los peatones fallecidos tienen 65 años o más, destacando el incremento a partir de los 75 años, población que ha pasado de 104 fallecidos en el 2018 a 134 en el 2019.
Más distracciones
Por cuarto año consecutivo, las distracciones fueron el factor concurrente más frecuente en accidentes mortales (estuvieron presentes en un 28 %), seguidas del consumo de alcohol (presente en un 24 %) y la velocidad (presente en un 23 %).
Más desplazamientos y más coches
El descenso en las cifras de fallecidos se produjo en un contexto de aumento de los desplazamientos de largo recorrido registrado en el 2019, un 2,6 % más que en el 2018, llegando a alcanzar los 427 millones de desplazamientos. El parque automovilístico se situó en 35.855.460 vehículos, un 2 % más que en el 2018. La expedición de permisos de conducir aumentó un 11 % y el censo de conductores fue de 27.311.015, un 2 % más que en el 2018.
104.000 accidentes con víctimas
Junto con los datos consolidados de siniestralidad mortal, se estima que en el 2019 se produjeron en España 104.077 accidentes de tráfico con víctimas, en los que, además de las 1.755 personas que perdieron la vida, 139.379 resultaron heridas, de las cuales 8.605 requirieron ingreso hospitalario.
«Olvido de las instituciones en las ciudades»
Los datos confirman que la mortalidad en accidentes en carretera se concentran mayoritariamente en los colectivos vulnerables, y en el ámbito urbano en los ciclistas y los motoristas, explica Ramón Ledesma, asesor de Pons Seguridad Vial y que fue subdirector de Tráfico en la primera etapa de Pere Navarro al frente de la DGT. Ledesma sostiene que la reducción a 90 kilómetros por hora del límite máximo en las vías convencionales ha supuesto una reducción del 10 % de la mortalidad en esas carreteras de doble sentido, «verdadero foco del problema de seguridad vial en carretera en nuestro país». Asegura que ese porcentaje podría reducirse en un 5 % en cinco años «si se ordena un proceso de vigilancia intensiva mediante drones con radares, ya que las medias de velocidad siguen estando, en muchas ocasiones, por encima del límite de 90».
Respecto a las vías urbanas, Ledesma dice que «se confirma el olvido de las políticas de seguridad vial por parte de las instituciones, y las consecuencias han sido un aumento del 6 % de la mortalidad en un entorno donde, con mínimas medidas, pueden conseguirse grandes resultados».
Aprobación del 30 en las ciudades
El experto de Pons Seguridad Vial reclama la aprobación urgente del límite general de 30 kilómetros por hora en vías urbanas para calles con un solo sentido, porque «el 30 es el airbag del vulnerable, es la mejor manera de proteger al débil en ciudad porque que no lleva carrocería». Considera que con esa reducción no se perjudica a los conductores, «porque las velocidades medias urbanas apenas superan los 20 kilómetros por hora». Al mismo tiempo, Ledesma pide que se hagan auditorías urbanas de pacificación del tráfico para los gobiernos locales se preocupen por conocer los puntos necesitados de especial protección en el control de velocidad.