La Xunta reclamará al Gobierno fondos extra para refuerzos de docentes por el covid

Montse García Iglesias
Montse García SANTIAGO

GALICIA

Santi M. Amil

El conselleiro anticipa un curso «de maior seguridade sanitaria», con un máximo de 25 alumnos en infantil
y primaria, y 30 en secundaria

04 sep 2021 . Actualizado a las 14:11 h.

«Debúxase un escenario de maior seguridade sanitaria e maior tranquilidade». Así cree el conselleiro de Cultura, Educación e Universidade, Román Rodríguez, que será un curso académico que será un curso académico que entiende «que inicialmente vai estar aínda condicionado pola situación sanitaria, pero que agardemos que avance progresivamente cara a normalidade pensando no curso seguinte». A partir del día 9 de septiembre se podrá empezar comprobar con el arranque en infantil y primaria.

En el actual contexto, el conselleiro ve como «gran noticia» la vacunación para jóvenes desde 12 años, ya que posibilitará que todos cuenten ya con las dos dosis en la primera semana del inicio de curso lo que deja ese escenario de mayor seguridad. «Este ano dá toda a sensación que obxectivamente a situación é diferente. O curso pasado había moitas incertezas, e agora falamos xa con datos, con balance e cunha experiencia. Por exemplo, non houbo transmisión interna nos centros. Ademais, temos a todas as persoas maiores de 25 anos xa vacinadas. Hai que ter en conta esas variables», afirmó. Para los menores de 12 años, recordó que seguirán los grupos de convivencia estable, es decir, con los grupos burbuja con un tope por aula de 25 alumnos hasta secundaria. A ello se le unirá la ventilación, mascarillas obligatorias y otras medidas similares, como la limpieza regular de manos o el mantenimiento de distancias también en los recreos, aunque los escolares podrán compartir objetos como balones.

Y será un curso en el que se intentará garantizar una presencialidad total, «que nós xa logramos o curso pasado excepto nalgún caso de FP puntual».

En todo caso, los protocolos definitivos tendrán que verse esta semana en la reunión que hay convocada para mañana con la ministra de Educación. «Hai que ir paso a paso», dijo Román Rodríguez. En esa reunión está previsto que se revisen las medidas acordadas en mayo y, además, tendrán que analizar las estructuras finales de la plantilla y valorar nuevos proyectos.

Desde la Xunta no esperan que haya grandes cambios en el documento de trabajo que ya presentó el Gobierno gallego a mediados de julio, y que establece cómo será la vuelta a las aulas. No esperan grandes cambios porque la convocatoria del Ministerio de Educación excluye al de Sanidad, como sería pertinente atendiendo a citas pasadas. Tampoco están llamados los consejeros autonómicos de salud. Y desde Madrid no se ha hecho llegar a San Caetano documentación de trabajo para esa reunión con la ministra Pilar Alegría, la segunda que tendrán las comunidades con ella desde el relevo en Educación.

De esta forma, la Xunta acudirá a esa convocatoria con su propio documento de trabajo. Y con una reivindicación: aportación de fondos económicos complementarios para hacer frente a los costes que tiene el sistema en cuanto a equipamiento, dotaciones y profesorado. El Gobierno gallego no mantendrá todo el profesorado del curso anterior al reducirse las distancias y haber más niños por aulas. Sí habrá más que en el curso anterior a la pandemia. Para poder mantener esos docentes, insiste la Xunta, harían falta fondos extra.

En el caso de las cuestiones sanitarias, «hai que agardar, temos que ter en conta os prantexamentos que faga Sanidade en Galicia», dijo el conselleiro. Resumió, por lo tanto, que se trata de «dúas esferas: unha sanitaria, de organización do sistema educativo para dar resposta a necesidades sanitarias, e outra de financiamento daquelas medidas que supoñan un sobrecuste para o sistema».

Para el sindicato ANPE, en cambio, el refuerzo del profesorado no debe supeditarse a los fondos del Ministerio de Educación. «A consellería ten que facer unha aposta polo profesorado xa», aseguró el responsable de la formación sindical, Julio Díaz, apuntando que en nueve comunidades ya han trabajado en ese sentido.

Este sindicato también reclama que se incluyan medidores de CO2, y más teniendo en cuenta el nuevo escenario con mayoría de variante delta. Y un nuevo protocolo que tenga en cuenta el nuevo contexto, y no trabajar con el que ya se presentó. «Non pode pasar un curso como o pasado», con estudiantes llevando en algunos casos mantas debido a las bajas temperaturas. «Foi un éxito manter a presencialidade, pero hai que facer un esforzo para mellorar», afirmó.