El nuevo coche del presidente y la cuñada de Carmela Silva se cuelan en el Parlamento
GALICIA
PP y PSOE fuerzan los reproches en un pleno cuando se abordaban cuestiones medioambientales y de política industrial
08 feb 2022 . Actualizado a las 21:25 h.Comentarios sobre la belleza de los diputados, el precio de los coches presidenciales, la contaminación del avión que utiliza Pedro Sánchez y la «cuñada de España». Para todos estos asuntos dio el segundo pleno del año en el Parlamento de Galicia, cuyos contenidos previstos en las mociones de la primera jornada -el cambio climático, la gestión de residuos o la crisis industrial de Galicia- no hacían prever el nivel de reproches tangenciales que protagonizaron sobre todo los diputados del PPdeG y PSdeG.
El runrún en el hemiciclo comenzó con un comentario del socialista Pablo Arangüena. Molesto con lo que él consideró un trato de autocomplacencia de la Xunta en materia climática, afirmó que «non din que son os máis guapos porque cantaría moito», cuestión que fue interpretada como un ataque personal a la conselleira de Medio Ambiente, que comparecía por petición propia. El roce hizo elevar el tono de la respuesta de Ángeles Vázquez, que además de pedirle «máis educación» deslizó en su exposición una crítica a Pedro Sánchez por el uso del Falcon presidencial y sus consecuencias en la contaminación. Los vehículos oficiales siguieron colándose entre otros intercambios verbales, y por segunda vez en este año -ya lo hizo Ana Pontón en el pleno de enero- el nuevo coche oficial del presidente de la Xunta y su coste -el modelo está valorado en 60.000 euros, aunque se adquirió en un paquete de leasing- volvió a ser objeto de chanza, de nuevo por parte de Arangüena, que se enredó con la diputada Paula Prado con polémicas del pasado, como el precio del Audi que utilizaba Emilio Pérez Touriño o «los regalos de la hostia», una frase atribuida a la dirigente popular en el marco de una investigación de la operación Pokemon.
Pero la mayor tensión la generó el viceportavoz Miguel Tellado, quien en una respuesta sobre la crisis industrial hizo mención a la «cuñada de España», como se refiere a la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, por el caso que acabó con un funcionario del concello vigués condenado por favorecer a una familiar de la ahora presidenta del PSdeG. El nuevo portavoz socialista, Luís Álvarez, que no tenía previsto intervenir en la sesión, pidió la palabra para reprocharle a Tellado el haber «devaluado» el debate político con ese comentario que consideró fuera de lugar por ser más propio de otros lugares, por lo que le pidió una rectificación. No lo hizo el número dos del PPdeG, que aprovechó la expresión para asegurar que lo que resta valor a la actividad pública es el nombramiento orgánico de una persona sobre la que pesan «sombras». Al margen de los rifirrafes, el grupo mayoritario tumbó las mociones para abordar la crisis de las industrias gallegas, cuyo debate continuó por la tarde orientado ya hacia los problemas de las empresas electrointensivas.
Altri, mejor en A Mariña
El tono bronco matinal se rebajó notablemente por la tarde y hasta hubo una proposición no de ley aprobada con los votos de todos los grupos parlamentarios. Se trata de una petición del Parlamento a la Xunta para dar «prioridade ao proceso de deseño da primeira fábrica de fibras téxtiles de España por ser unha gran aposta, tanto dende o punto de vista económico e laboral, como dende o punto de vista estratéxico», así como que se propicie un emplazamiento «preferente» en la comarca de A Mariña, y, en todo caso, en la provincia de Lugo. La proposición no de ley en la que se trató sobre el interés de la empresa Altri para asentarse en Galicia y desarrollar este proyecto, fue defendida por la diputada Elena Candia, y generó más debate en torno al punto referido al impulso de la iniciativa a través de los fondos Next Generation.
Además, la Cámara demandará al Goberno central que se implique activamente «nunha solución para reactivar Alu Ibérica en A Coruña». Los votos populares servirán para reclamar la mediación de la ministra de Trabajo para evitar que el ERTE vigente no acabe en despidos, exigencia que se acompaña de una nueva petición de un precio energético ajustado para este tipo de empresas.
Entre los asuntos que no salieron adelante en el pleno está una petición del BNG, que trasladó una campaña pública sindical apoyada por 15.000 personas, de crear una red única de servicios sociales, un debate que la nacionalista Olalla Rodil aprovechó para denunciar las condiciones de trabajo de las personas que desempeñan estas labores de cuidado y atención.
Por su parte, la diputada del Bloque Mercedes Queixas ha reclamado a la Xunta que se destine al sector cultural un 2 % de los fondos Next Generation que le correspondan a Galicia, proposición que ha sido frenada por los votos del grupo mayoritario.
Por su parte, los socialistas aprovecharon otra propuesta que no salió adelante sobre el impulso a la investigación y el desarrollo en las empresas gallegas para denunciar que el programa de la Xunta con esta finalidad destina unos «ridículos» 800 euros a cada empresa.
Abusos sexuales a menores
Los abusos sexuales a menores en el seno de la Iglesia o en centros vinculados llegarán al Parlamento gallego. Lo harán de mano de la oposición, tanto el BNG, que ya ha registrado una batería de iniciativas al respecto, como del PSdeG, que trabaja en las suyas propias, según pudo confirmar Europa Press. Las iniciativas del Bloque instan a la condena de los hechos y también a que el Gobierno gallego respalde y dé soporte a las víctimas de los abusos tanto en el proceso de denuncia como en la superación de secuelas de los hechos. Los nacionalistas quieren que el presidente de la Xunta se pronuncie sobre una declaración pública en la que aseguró que, más allá de los casos vinculados a la Iglesia, se deben investigar todas las instituciones en las que se han denunciado caso