Experimentar en la cocina está muy bien, pero hay platos sagrados que hieren la sensibilidad de los más puristas, muchas veces, con razón
04 feb 2021 . Actualizado a las 10:52 h.Con la fabada no se juega. Eso pensaron muchos asturianos al ver a Jordi Cruz presentando una versión un tanto particular en una de las múltiples ediciones de «MasterChef». Ni siquiera sus estrellas Michelin le salvaron de ser el blanco de las críticas esa noche en redes sociales. Su fabada de almendras no convenció a los amantes de la gastronomía asturiana, y algunos incluso pedían en Twitter la independencia del Principado para no tener que aguantar «semejante despropósito».
Las redes volvieron a estallar poco después cuando un tuitero decidió compartir una foto de una fabada que era incluso más minimalista que cualquiera de los platos del chef catalán. La publicación se hizo viral en pocas horas y levantó ampollas en más de un usuario. Al final, el propio autor (un guardia civil de Santander) salió a defenderse de las críticas. No se trataba de un plato de restaurante, sino de un simple intento amateur de preparar este clásico. Pero la polémica ya estaba servida porque, para muchos, «la fabada es sagrada».
Este plato también es uno de los que más gustan a los extranjeros cuando visitan nuestro país (junto a la paella, la tortilla de patata, las croquetas o las tapas, claro). El furor por esta elaboración hace tiempo que traspasó las fronteras nacionales. Y es que es difícil resistirse a un buen compango y unas buenas fabes. Pero el problema llega cuando intentan replicar la receta. Aquí podemos encontrar de todo.
¿Fabada asturiana con huevo? Parece que en este restaurante japonés especializado en cocina española pensaron que era una buena idea coronar este plato tradicional de una manera poco ortodoxa. También hay quien pone chorizo en la paella, ¿no?
Pulpo, almejas, filetes de pescado… Esta fabada «mexiterránea» es una auténtica oda al mar (aunque tampoco falta el chorizo). Sí, es cierto que las fabes van con casi todo, pero el hashtag #fabadaasturiana confunde un poco.
Y premio para la persona que encuentre las fabes en este batiburrillo de zanahoria, maíz y ¿guisantes? Igual está exquisita, pero cuesta mucho reconocer el plato original.
Esta imagen nos recuerda casi más al pote asturiano (o incluso al caldo gallego) que a un plato de fabada. Muchos confunden estas dos elaboraciones, aunque la principal diferencia está en el uso de verdura. El pote lleva de forma tradicional berza y patata, la fabada, no.
