Lejos de la perfección aparente, cuatro meses después de la muerte del cámara, la historia feliz se ha enfangado: cocaína, prostitución, juegos autoeróticos... Esta semana se han revelado nuevos datos que impulsan a la familia Biondo a exhumar el cadáver. Quieren saber la verdad
20 oct 2013 . Actualizado a las 17:55 h.Tras más de cuatro meses del fallecimiento del cámara Mario Biondo la polémica sobre su muerte no hace más que acrecentarse. La aparente felicidad del matrimonio, que estaba sometiéndose a tratamientos de fertilidad para tener un hijo, los mostraba de puertas afuera como la pareja perfecta. Pero la aparición del cadáver la mañana del 30 de mayo de 2013 destapó una serie de historias, cuanto menos, sorprendentes.
Esta misma semana, tras casi cuatro meses en silencio, el entorno de Raquel Sánchez Silva ha hablado a diversos medios asegurando que Mario Biondo no solo era consumidor de cocaína, sino que esa misma noche había sacado del cajero 110 euros para comprarla, que había acudido a un prostíbulo y que tras consultar numerosos contenidos pornográficos desde su ordenador murió de forma accidental practicando un juego autoerótico. No sería la primera vez que esto pasaba.
«¿Por qué después de tanto tiempo callada habla justo ahora que un nuevo juez ha decidido reabrir la investigación y exhumar el cadáver? Es algo curioso». Así respondía la madre de Mario Biondo, Santina, en declaraciones exclusivas a La Voz. Pero no se queda ahí. Asegura que su hijo descubrió un secreto esa noche y que ella lo conoce. Y que no se van a quedar de brazos cruzados ante el sinfín de mentiras que el entorno de la viuda ha lanzado sobre su hijo. Piensan tomar las medidas legales que sean necesarias.
«¡No soy una puta!»
Pero Santina no es la única que ha hablado. Andrea, el hermano de Mario Biondo, también ha concedido una entrevista a este medio, en la que abre la caja de los truenos. Tras descubrir las últimas noticias que han salido durante esta semana no se ha contenido y ha hablado claro desde Madrid, donde se encuentra con el resto de la familia para «descubrir la verdad».
Siempre según su versión, en cuanto la policía dejó que la familia pudiera acceder a la casa, son Raquel, Santina y la hermana de Mario, Emanuela, las que entran. Durante su búsqueda para aclarar lo que había sucedido Santina encuentra un papel con un link escrito a lápiz sobre el teclado del ordenador de su hijo. Reconoce la letra de Mario y decide mostrárselo a Raquel. «¿Cómo ha encontrado Mario esto? ¡No soy una puta! ¡No soy una puta!». Su reacción les pareció un tanto extraña, pero tras el shock por lo sucedido decidieron no ahondar en el tema. Por eso están convencidos de que Mario consultó contenidos pornográficos esa noche buscando algo. Con este mismo fin acudió al burdel. No quieren relacionar de forma clara que lo el cámara buscaba fuera algo relacionado con Sánchez Silva, pero tienen claro que con 60 euros, que fue el pago que hizo en el prostíbulo, no estuvo con ninguna mujer. También descartan que haya sido un juego autoerótico el que terminó de forma accidental con la vida de Mario pues el cadáver fue encontrado vestido. Con un pantalón y una camiseta.
En cuanto al alcohol en su sangre apuntan el dato oficial: 0,56 gramos por litro. Lo que equivale a menos de dos cervezas. La familia está segura de que el cámara siciliano no consumía cocaína, aunque esa noche si lo hiciera. Los análisis toxicológicos que se le practicaron a Mario Biondo tras la autopsia así lo revelan: «Si la consumía sería con ella. Hasta entonces Mario odiaba las drogas. No pondría en peligro su trabajo por eso. Cualquiera que lo conociese os lo puede decir», afirma Santina. Por su parte Andrea decía: «En Honduras es imposible que la consumiera. Puede decirlo Angelo Farina. Él trabajó con él allí y niega todo esto. Ha puesto en marcha una iniciativa para recaudar fondos para pagar abogados, costas, los viajes a Madrid... Todo para la descubrir la verdad». Parece que de una forma u otra el fallecimiento de Mario ha hecho que salga a la luz la otra vida del matrimonio. Una vida bastante diferente a lo que aparentaban.
Y el escándalo aún acaba de comenzar. Prostitutas, drogas, juegos autoeróticos... La otra cara de la pareja que ni sus más cercanos podían presentir. Quizás nunca se sepa toda la verdad, pero de momento el fiscal de Palermo ha decidido abrir una investigación mientras desde España afirman que no hay ningún indicio criminal en el caso.
Parece que la separación no es solo entre la viuda y la familia Biondo, sino también entre los juzgados de ambos países. Los deseos de la presentadora de no convertir el fallecimiento de su marido en un circo ya quedan lejos de la realidad.