El trabajo colectivo, la mejoría defensiva, el doble pivote y Denis Suárez, claves
26 ago 2019 . Actualizado a las 21:47 h.Una semana después la percepción del equipo ha cambiado. En el fútbol cada vez es más difícil encontrar los grises y el paso del blanco al negro es vertiginoso. Lo cierto es que aquellos pequeños pasos de los que hablábamos la semana pasada, el sábado parecieron convirtiese en grandes zancadas. El Celta se mostró ordenado, disciplinado, eficiente y solidario en defensa minimizando las ocasiones rivales. Y luego están Denis y Aspas que se buscan… y en ese momento todos (incluidos los rivales) tenemos la sensación de que algo va a pasar. Pero ni la semana pasada éramos lo que éramos ni ahora somos lo que somos. La conclusión la misma… seguir trabajando.
1la clave
El trabajo colectivo
Es difícil resaltar alguna clave por encima de otras. Si algo lució el sábado fue el trabajo colectivo celeste tanto en defensa como en ataque. De inicio Celta y Valencia apostaron por un planteamiento y posicionamiento similar. Pero mientras los ché se estrellaron por dentro, los vigueses supieron jugar mejor con los espacios de su rival y los aprovecharon para volver a sacar partido de las transiciones rápidas, que sostenidas en el trabajo entre líneas de Aspas tanto rédito habían dado en el pasado. Reapareció la pausa y la amplitud en ataque consiguiendo los vigueses trasladar el balón de un lado a otro pero en las zonas de finalización, donde se hace daño.
2EL APUNTE
Mejoría defensiva
Escriba juntó tres lineas que apenas perdieron la distancia entre sí durante los 90 minutos. Aspas y el Toro se situaron por detrás de Parejo y Kondogbia haciendo muy difícil la conexión con Maxi y Gameiro perfectamente marcados por Araujo y un sorprendente Aidoo que se mostró rápido y contundente. Al Valencia solo lo quedó la respuesta por fuera y por ahí llegaron las contadas acometidas del rival pese a la implicación de los jugadores de banda en el trabajo defensivo.
3EL PROTAGONISTA
El señor Suárez
Inteligente, eficiente y sacrificado, así es como se podría calificar el partido del Denis. Inteligente para adaptarse a su nueva posición en el campo. Encontró dónde y cómo hacer daño al rival, encarando en las zonas que demandaban desborde y asociándose donde el pase era la mejor opción. Además, ensanchó el campo partiendo de fuera a dentro y no dudó en buscar con Olaza la superioridad en banda cuando fue necesario. Eficiente porque apenas se equivocó y sacrificado porque cuando hubo que correr hacia atrás apoyó a su línea y a su lateral.
4la consolidación
El doble pivote
¿Habrá conseguido Beltrán convencer a Escribá de sus prestaciones? El medio campo fue superior y esa fue una de las claves de la victoria. El doble pivote celeste estuvo perfecto en defensa cerrando las líneas de pase del medio campo rival con sus dos puntas. Basculó y se escalonó de manera que además de eliminar los espacios entre líneas llegaron a las ayudas sobre los centrales. En ataque la movilidad de los dos permitió a Beltrán centrase más la iniciación del juego y a Lobotka en la elaboración.