Fer López: «Debutar en Primera es un sueño realizado y tengo que ir a por el siguiente hasta que no queden sueños»
GRADA DE RÍO
El canterano, que estaba disfrutando «como un enano» en su primer partido en la élite, admite que pensó que se había roto el cruzado
27 dic 2024 . Actualizado a las 10:56 h.El canterano del Celta Fer López valoró para los medios del club lo que está siendo hasta ahora la temporada en la que ha debutado con el primer equipo, tanto en liga como en Copa, además, de estar siendo, hasta la lesión sufrida en su primer partido en Primera, una pieza clave del filial que dirige Fredi Álvarez. Sus primeros minutos fueron en el torneo del ko, frente al San Pedro. «Es uno de los días más felices de mi vida, sobre todo, porque conseguimos la victoria. Jugué en media parte, que tampoco me lo esperaba. Estoy muy agradecido a los compañeros por lo fácil que me lo pusieron y al cuerpo técnico por la oportunidad», subraya.
Recuerda que ese debut fue «contra un rival de una categoría más baja, al ser la primera ronda de Copa. Y sí que es verdad que quizás no tanto es como el partido de Primera División, pero sí que siempre hay, siempre antes de jugar, un pelín de nervios». Además, las circunstancias actuales son especiales, porque fue un estreno junto a compañeros con los que lleva coincidiendo en los últimos años. «Te ves jugando con el primer equipo, con amigos tuyos, con los que has jugado no toda la vida, porque tienen un año más que yo, pero estos últimos tres o cuatro años, desde juveniles, y al final es algo que mola mucho estar ahí con ellos, compartir vestuario con ellos», aparte de que se alegra de ver que están ahí.
Su segundo partido fue también de Copa, frente al Salamanca CF UDS y marcando un doblete. «Fue una noche inolvidable, no solo por los goles, sino por el partido en general, que yo creo que cuajé un buen partido. Y también por el ambiente: el campo estaba muy bien, la afición de ellos y la nuestra», recalca. Poder ver portería fue muy especial: «Veo que hay espacio de espalda, intento cortar, Tade me pasa el balón, luego hay un rebote, me cae el balón a la derecha, me la pongo a la izquierda y voy conduciendo hacia el defensa. Veo que no me sale, que me deja tirar, veo hueco en la derecha del portero y fue casi más un pase a la red que un tiro», describe. Le supuso «una sensación muy difícil de describir, pero felicidad máxima». Aunque no lo hizo en el momento, se lo dedica a su abuela, fallecida el año pasado, y a sus padres y su hermano.
A Fer le coincidió celebrar los goles en el lado de la afición del Celta, lo que todavía le dio un plus. «Los goles se escuchan un huevo, sobre todo, en un campo tan grande y con tanta afición», sobre todo local, pero también visitante. «El apoyo que nos dan en cada partido, tanto en equipo como filial, es brutal», agradece al celtismo. En cuando al objetivo de este torneo, se muestra ambicioso. «Para mí, es ir pasando rondas e intentar ganarla. Es súper ilusionante, ves que vas avanzando y que son tres o cuatro partidos que deciden un título», plantea.
Ya sobre su estreno en Primera, no oculta que le cogió por sorpresa verse en el once. «Yo tampoco lo esperaba. Cuando Claudio dio la alineación, que fue en el vestuario, ahora y pico antes, y dijo mi nombre, estaba flipando un poco», reconoce. Pero tras unos primeros minutos de asimilarlo, se sintió más tranquilo. «Y luego ya cuando toco el primer balón, cuando se lo doy a Mingue, ya normal», asegura. «Sí que es verdad que hay diferencias entre Primera División y Primera Federación, es otro ritmo, y era un equipo complicado, porque siempre tenía a un tío encima», cuenta. Pese a ello, cree que «como debut, no estuvo mal». Recuerda que siempre tenía a Van der Heyden muy cerquita cada vez que recibía y que cada vez que recibía, le hacían falta, mientras en Primera Federación podía seguir con el balón controlado. Fue un rival muy complicado. «Al principio sí que estaba un poco más pensando dónde estaban las ventajas, cómo jugaba el rival, hasta que empecé a tocar un par de balones, y yo luego ya creo que me desenvolví mucho mejor».
El gran lunar del debut fue la lesión de la que se está recuperando. «Todo viene de un córner, que estoy uno contra dos, creo, cojo el balón, le tiro un sombrerito al lateral derecho; luego, fallo el pase, y al presionar, le llega la bola a Van der Heyden e intento no tirarme al suelo, porque yo no quería echar la bola fuera, quería meterle el cuerpo para quedarme la bola y volver a ir hacia adelante. Y como que al meterle el cuerpo se me queda un poco la rodilla y el tobillo clavado», revive la acción. Se siente afortunado, porque creyó que sería peor. «Fue mala suerte, pero viendo la imagen, estoy muy contento con que la lesión sea solo esto. Cuando me enseñaron la imagen en el vestuario, pensé que me había roto el cruzado, y estaba pensando ya en mis padres en la grada, pero por suerte puedo darle noticias menos malas, y ya desde ya intentando recuperármela lo antes posible», añade.
Fer no había tenido lesiones importantes y celebra que los fisios están contentos con su progresión, aunque sabe que debe tener paciencia. «Estoy intentando trabajar lo máximo para llegar lo mejor posible. Me dijeron que esto es una lesión de tiempo y que tengo que esperar, pero estoy intentando trabajar lo máximo para que vaya bien», señala. Le queda una sensación agridulce del debut por estas circunstancias. «Cuando estoy jugando en el campo, soy de las personas más felices del mundo, estaba disfrutando como un enano, pero luego llega el varapalo ese, y piensas lo que podía haber pasado, que si te rompes el cruzado ya te pierdes toda la temporada. Por eso ahora sigo contento» de que no haya sido más grave.
Fer López ha cumplido uno de sus «sueños, que era jugar con el Celta en Primera».«Espero hacerlo, ojalá, más veces. Es un sueño realizado, tengo que ir a por el siguiente, y así hasta que no queden sueños», dice. «Estoy ahí gracias al trabajo que estamos haciendo como grupo, y al trabajo que he hecho yo, individualmente, desde hace tiempo. Pero sin mis compañeros, está claro que no podría haber debutado, tanto estos como los del primer equipo que me han ayudado mucho y me han hecho sentirme muy cómodo», dice recordando también a los del filial, con los que disputó el play-off el curso pasado. «Este año no empezamos tan bien, pero ahora los chavales jóvenes están dando la cara, y creo que puede ser un año muy bonito», augura.
El canterano es consciente de que tiene margen de mejora y que para coger el ritmo de Primera necesitaría partidos. A nivel técnico, cree que debe mejorar el aspecto defensivo y en lo físico, algo en lo que está trabajando de cara a ser más fuerte y rápido y aguantar mejor los partidos. «Yo creo que en Primera, al jugar a uno o dos toques, en principio, me beneficia», apunta. A los canteranos que vienen por detrás les dice que «sigan trabajando, que van a pasar momentos duros, es normal». Mencion que él también los pasó y su experiencia le dice que« la diferencia es la gente que sabe sobreponerse, que sabe pasar esos momentos, y si lo consigues, llegarán momentos más bonitos», que hay que disfrutar cuando se presenten.