Kerry ataca a Bush por la pérdida de soldados en Irak

La Voz B.C. | CORRESPONSAL NUEVA YORK

INTERNACIONAL

Afirma que el presidente ha llevado a EE.UU a una catástrofe Albright llama irresponsable a Cheney por insinuar que habrá un ataque si gana el demócrata.

08 sep 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

La simbólica cifra de 1.000 soldados estadounidenses muertos en la guerra de Irak le ha dado a John Kerry, el candidato demócrata a la presidencia, un nuevo arma para atacar al presidente George W. Bush. Tras meses de excesiva suavidad en sus críticas a la actual Administración, el senador por Massachussets, acuciado por la subida en las encuestas de su rival tras la Convención Republicana, aprovechó que el martes se alcanzó la fatídica cifra para vapulear ayer con dureza al presidente desde Cincinnati, donde Bush anunció por primera vez que Irak era una amenaza para Estados Unidos. «Las equivocaciones de Bush han llevado a Estados Unidos a tomar la dirección equivocada respecto a Irak y han dejado a nuestro país sin los recursos que necesitamos. Yo lo defino como una elección catastrófica que nos ha costado ya 200.000 millones de dólares porque fuimos solos y hemos pagado un precio aún mayor en jóvenes vidas americanas», clamó Kerry. Bush había intentado evitar en sus discursos referirse a los muertos, pero ayer, después de que todas las televisiones repitieran una y otra vez el fatídico número y tras el tour televisivo de su secretario de Estado, Colin Powell, tuvo que hablar de ellos. «Lamentamos todas las pérdidas humanas. Honraremos su memoria completando nuestra misión», afirmó escuetamente. En plena campaña electoral, el presidente no dudó en utilizar la polémica para defender la guerra contra el terrorismo y su labor al frente de ella. «Todavía estamos en guerra. Tenemos que hacer todo lo que podamos para defender nuestra patria. Perseguimos a los asesinos fuera para no tener que enfrentarnos a ellos en casa. Estamos haciendo grandes progresos y al final venceremos», aseguró. Y a las duras críticas del vicepresidente Dick Cheney, quien afirmó que es absolutamente esencial elegir bien el 2 de noviembre porque, insinuó, si gana Kerry «existe el peligro de que seamos atacados nuevamente», respondió ayer la ex secretaria de Estado Madaleine Albright. «Este tipo de táctica empleada por el vicepresidente de Estados Unidos es irresponsable», aseguró la colaboradora de Bill Clinton.