Navidad en el HULA: recién nacidos vestidos de Papá Noel y mayores que combaten la soledad
LUGO
«Aquí estamos como en casa», cuentan los pacientes que están hospitalizados durante las fiestas
31 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Pasar una mañana de Navidad en el HULA permite entender cómo de distintas son las fiestas para aquellos que tienen que estar los días más señalados en una cama de hospital. Un árbol gigante, un belén de categoría y muchas luces dan vida a todos los rincones del edificio, pero son los pacientes y los sanitarios los encargados de ambientar y llenar de vida pasillos, habitaciones y salas de espera.
Teatro, conciertos, concursos de postales y decoración, menús especiales para Nochebuena y Fin de Año, una privilegiada visita de Papá Noel y de los Reyes Magos, villancicos... Son algunas de las iniciativas que consiguen hacer estancias hospitalarias mucho más amenas y cálidas, fruto del trabajo que realiza la Supervisora de Humanización Hospitalaria del HULA, Gloria Enríquez.
En Digestivo, una decoración de ensueño
María José Fernández, supervisora de la planta de Digestivo, y su equipo, se ha encargado de diseñar una decoración de ensueño. En el mostrador, varios renos cuelgan de una hilera de luces de colores. También hay árboles, figuras, almanaques... Son muchos los detalles que centran la atención de los pacientes y familiares que salen a caminar por los pasillos.
«Intentamos que estén cómodos, y más en fechas como estas. Y para eso es importante conocer la situación de cada paciente», cuenta la supervisora. Esta atención personalizada y el cariño de los sanitarios son la base que hace que los usuarios se lleven un recuerdo mucho más llevadero de su estancia en el hospital. «Algunos están meses ingresados aquí, es imposible no sabernos sus nombres. Después, vuelven cargados de bombones y sonrisas, completamente recuperados», desgranan.
Mayores que están solos
Sin embargo, la realidad que conocen aquellos que trabajan en el centro sanitario es más cruda Navidad tras Navidad. «Cada vez hay más personas solas, porque resulta más difícil compatibilizar la estancia hospitalaria de un familiar con el trabajo. Antes, lo raro era ver a una persona mayor sola y ahora se invierte mucho esta situación», relatan. Para paliarlo, un programa de Humanización Hospitalaria promueve la estancia de voluntarios que hacen compañía a los mayores.
«Aquí estoy como en casa»
Afortunadamente, Evangelina Grandas, una lucense de 73 años, puede presumir de tener quien la acompañe. «Ingresé el Día de Navidad, pero me darán el alta para volver a casa este 31 de diciembre», relata, aunque por su estado de salud no prevé un gran jolgorio para despedir el año.
«Aquí estamos como en casa. A mí me ingresaron muchas veces y siempre me cuidaron muy bien», dice muy orgullosa Evangelina, que no duda en alabar a todos los trabajadores de la planta y del HULA en general. «Y si un día hay alguien que tiene un momento malo, pues hay que perdonárselo como nos lo perdonan a nosotros, porque todos somos humanos y una cosa mala no puede estropear mil buenas», dice muy convencida.
Bebés que parecen Papá Noel
Lucía Vázquez, supervisora en la planta de Obstetricia, también es la culpable de que su planta esté repleta de adornos y decoración navideña. Con los renos como temática principal y presidiendo las entradas, un tablón con fieltro en forma de estos animales contiene el nombre de todos los niños que han nacido desde el 9 de diciembre. «Intentamos que todo el personal se implique, lo hacemos entre todos», explica Lucía. Asimismo, elaboraron «saquitos» para envolver a los bebés y darles forma de Papá Noel, además de incluir un gorro con cuernos de reno.