El alcalde anuncia a los ourensanos subidas en los impuestos municipales

Miguel Ascón Belver
Miguel Ascón OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Imagen del pleno celebrado este viernes en el Concello de Ourense.
Imagen del pleno celebrado este viernes en el Concello de Ourense. Santi M. Amil

Jácome culpa a la inflación, pero niega la quiebra que denuncia la oposición

02 dic 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde el día 16 de octubre, el Concello de Ourense no puede solicitar ayudas de la Xunta porque no ha cumplido con sus obligaciones ante el Consello de Contas. Este viernes, en el pleno mensual de diciembre, el Ayuntamiento aprobó por fin la cuenta general del año 2022 para remitírsela al órgano encargado de fiscalizar la gestión económica de las Administraciones públicas gallegas. Ese documento refleja que el ejercicio se cerró con un déficit de casi nueve millones de euros y, dadas las circunstancias, serán necesarios ajustes en el futuro. Así lo avanzó el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, que dijo que «obviamente» habrá que subir los impuestos y tasas municipales. Según anunció, llevará a pleno una actualización de las ordenanzas fiscales que regulan esos tributos, entre los que están, por ejemplo, el IBI o la tasa por la recogida de basura.

Pese a que el programa electoral con el que Democracia Ourensana se presentó a las elecciones del pasado mes de mayo recogía la promesa de rebajar un 40 % el IVTM, el impuesto de vehículos, esa no será la hoja de ruta del gobierno municipal en materia tributaria. Luis Seara, del BNG, había alertado previamente de la grave situación económica del Concello y Jácome culpó de ello al incremento en los precios. «No es cierto lo del tema de la quiebra técnica, pero lo que sí es verdad es lo siguiente. Está ocurriendo en toda España. Ha habido una inflación en los últimos años gravísima», dijo Jácome, que calculó que el IPC real ronda el «treinta y pico» desde el 2018. En ese contexto, razonó, «se han disparado los gastos, pero los ingresos, no». Y fue en ese momento cuando avanzó sus planes en esta materia: «Por cierto, que ahora hay que traer las ordenanzas todas y actualizar el IPC. Y hay que subir obviamente las ordenanzas». Seguidamente, el alcalde recordó que, al arrancar el pasado mandato, se completó una rebaja del 20 % en el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles). Eso supuso perder 35 millones de euros en ingresos desde entonces, pero el alcalde aseguró que, pese a todo, el Ayuntamiento nunca estuvo mejor gestionado.

Esa visión contrasta radicalmente con la expresada por todos los grupos de la oposición. De hecho, este viernes se debatió una moción presentada por el PP para urgir al gobierno local la presentación de unos presupuestos actualizados ya que actualmente se sigue funcionando con los del año 2020 prorrogados. La popular Ana Méndez hizo hincapié en la «pésima xestión dos recursos públicos» y María Fernández, del PSOE, subrayó que las ordenanzas fiscales llevan sin actualizar desde el año 2014, cuando aún gobernaban los socialistas. Y Luis Seara, del BNG, habló de una «quebra técnica».

Otros asuntos

Entre los asuntos de interés municipal que se debatieron en el pleno de este viernes estaban, de nuevo, las dos modificaciones presupuestarias con las que el gobierno municipal pretendía movilizar 5,5 millones de euros del ahorro municipal. De nuevo, ante la ausencia de los informes preceptivos del interventor, la oposición rechazó en bloque la inclusión de esos puntos en el orden del día. Este tema provocó un nuevo enfrentamiento entre el político y el funcionario. El alcalde acusó a este de actuar con «mala fe» por no entregar esos informes a tiempo y el técnico encargado de fiscalizar la gestión económica del Concello pidió poder hablar. Jácome se lo negó: «No tiene derecho a la palabra para defenderse». Además, sugirió que tomará medidas contra él al igual que con la tesorera a quien ya se le notificó su cese, según dijo el regidor, que en el pasado calificó a la funcionaria como «demasiado tiquismiquis».

Destaca, además, la aprobación de dos mociones del PSOE, ambas avaladas por todos los grupos salvo por Democracia Ourensana, que se abstuvo. En una de ellas, los socialistas pedían que la ciudad sea candidata a convertirse en capital europea de la cultura. «No podemos presumir de Ourense porque no es referente de nada en el mundo», dijo el portavoz de DO en este punto, Rafael Martínez Cachafeiro. En la otra iniciativa, que reclama más medios para el Auditorio y el regreso del Concello a la organización del OUFF, Jácome criticó la etiqueta de «Atenas de Galicia» para la ciudad y dijo que «ojalá hubiéramos sido el polo cultural o artístico durante alguna época».

El alcalde retiró la moción crítica con la prensa para evitar una enmienda que la alteraba

Democracia Ourensana defendió este viernes una moción «para a defensa da información veraz nos medios de comunicación». En ella, la formación liderada por Gonzalo Pérez Jácome se refería a los periodistas como «miserables» o como «profesionales carroñeros»·. El Colexio de Xornalistas de Galicia emitió un comunicado en el que pedía la retirada de la iniciativa, que proponía garantizar la defensa legal de los concejales ante prácticas supuestamente delictivas, así como abstenerse de contratar servicios a los medios «que hayan sido condenados». Efectivamente, Jácome retiró la moción, pero solo después de haberse debatido y no por el llamamiento del colegio profesional, sino porque el PSOE había presentado una enmienda de sustitución que cambiaría por completo las propuestas de acuerdo, como él mismo explicó. Los socialistas proponían una declaración de apoyo a la libertad de expresión y reclamaban al gobierno local que dejase de utilizar las redes oficiales del Concello para «fins partidistas». Sin embargo, ni ese texto ni el original presentado por DO llegaron a votarse.

Pero la retirada de la moción no evitó las críticas de todos los grupos de la oposición al ejecutivo liderado por Jácome. Todos acusaron al alcalde de tratar de coartar la libertad de prensa. Por otra parte, cuando se inició el debate de la moción, los periodistas que estaban en el salón de plenos se marcharon en silencio en señal de protesta y el alcalde se refirió a ellos como unos «demócratas do carallo».

La abstención del PP impide debatir una moción sobre el acoso a la jefa de la Policía Local

El BNG defendió este viernes una moción de urgencia en la que pedía la reprobación de Jácome por la sentencia que condena a su exconcejal Telmo Ucha y al Concello de Ourense a indemnizar a la jefa de la Policía Local por un caso de acoso laboral. Pero la iniciativa, que contaba con el apoyo del PSOE, no llegó a debatirse. El PP se abstuvo en la urgencia ya que, según explicó Miguel Ángel Michinel, los populares quieren antes hablar con la afectada. «Nos reuniremos para ver lo que a ella más le interesa», dijo. Más tarde, el partido difundió una texto en el que subraya que la sentencia «pon de manifesto e exemplifica a completa ausencia das máis elementais normas de trato ás persoas que traballan no concello por parte do goberno».

Jácome, por su parte, insistió en que el Concello recurrirá la resolución judicial y se mostró convencido de que ganará. Pero, en cualquier caso, la culpa de no haber activado correctamente los protocolos internos antiacoso sería de los funcionarios de Recursos Humanos, aseguró.