La derrota en Palma del Río deja al Teucro a dos puntos de la fase de ascenso

La Voz

PONTEVEDRA

16 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La derrota del Teucro en Córdoba, tal y como se esperaba, ha supuesto la salida de los pontevedreses de la zona de promoción. Un empate lo habría mantenido en el alambre de la quinta posición, pero el 35-34 lo relegó a la sexta posición con 24 puntos, dos menos que el Guadalajara, que ahora marca el límite igualado con el Anaitasuna y el propio Palma del Río. El Pozoblanco es segundo con 27.

El cuadro navarro parece ahora mismo el adversario más débil y, por lo tanto, el clavo al que se puede agarrar el equipo pontevedrés para mantener viva la ilusión de disputar la fase de ascenso. El Anaitasuna confirmó estar en una etapa convulsa al sudar tinta para superar al Grupo Pinta en Torrelavega (30-32).

El Guadalajara, en franca progresión, no tuvo ningún problema para hacerse con los dos puntos en juego a domicilio frente al Almoradi. Los jugadores alcarreños se dieron un festín y se impusieron por 23-32.

Tampoco sufrió el Pozoblanco, que volvió a demostrar que en su pista es casi intocable. Los cordobeses cortaron de cuajo las esperanzas de su vecino Cajasur con un contundente 43-29.

Peor lo pasó el Puerto Sagunto. El líder avanzó hasta los 30 puntos con un triunfo más ajustado de lo esperado sobre el Puente Genil. El penúltimo clasificado aguantó el tipo, pero sucumbió por 23-27.

Sorpresa en Huesca

El Barakaldo protagonizó una de las sorpresas de la jornada al arrancar un empate de la pista del Huesca, que es séptimo con 23 puntos. Los vascos continúan creciendo como equipo, pero quizá han reaccionado demasiado tarde y apenas tienen margen de maniobra para meterse entre los cinco primeros. Cuentan con 19 puntos, por lo que deben remontar siete para colarse en la promoción.

Sin embargo, la campanada se produjo en Artaleku. El Bidasoa, con 18 puntos, dilapidó buena parte de las pocas opciones que le quedaban de pelear por retornar a Asobal al caer inesperadamente con el Adelma Santander por 33-36. Está claro que los cántabros se están convirtiendo en matagigantes.