La continuidad de Ángel Viadero en el banquillo del Pontevedra está prácticamente imposible y salvo sorpresa será destituido. El técnico tiene a su favor el hecho de que el equipo ofreció una buena imagen pese a viajar en cuadro a Extremadura, pero la sexta derrota, tercera consecutiva, en nueve jornadas parece pesar demasiado porque en la entidad empieza a aparecer el miedo a revivir la historia del Racing. No obstante, no se puede descartar que el Consejo opte por darle una última oportunidad.
Fuentes del club aseguran que la destitución de Viadero no conlleva la obligatoriedad de finiquitar a Pablo Alfaro tal como se asegura desde el comité nacional de entrenadores y de ser cierto eso debería facilitar las cosas en ese sentido. Por cierto, el ex técnico fue despedido ayer en el Recreativo y al que según se apuntó ayer en la Radio Galega podrían deberle 70.000 euros.
En el Pontevedra solo reconocen un par de nóminas de un contrato global que aseguran no superaba los 25.000. A lo mejor la solución pasa por alcanzar un acuerdo para lograr la vuelta del aragonés, algo que semeja muy difícil. Paco Santos anunció la llegada de un fichaje esta semana.