Triatlón en familia en Pontevedra: «Ayer compitió papá y hoy nosotros, que somos dos mellizos de 13 años»

Carmen Feijoo PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Un momento de la prueba ciclista del triatlón durante este domingo en Pontevedra.
Un momento de la prueba ciclista del triatlón durante este domingo en Pontevedra. Ramón Leiro

Pontevedra volvió a sacar músculo con el deporte fetiche de la ciudad en un fin de semana con más de 1.700 atletas junto al Lérez

23 jun 2024 . Actualizado a las 20:20 h.

Pontevedra es la «gran casa del triatlón». Así lo decía este domingo un atleta madrileño que sobre las dos de la tarde trataba de empaquetar su bicicleta para volver a la capital de España. Era uno de los alrededor de 1.700 deportistas que este fin de semana se dieron cita en la ciudad del Lérez, que volvió a sacar músculo con su deporte fetiche en dos campeonatos de España, el de triatlón por clubes —celebrado el sábado— y el de relevos mixtos, —que tuvo lugar el domingo por la mañana— y en los torneos autonómicos de Galicia en distancia SuperSprint.

Con un sol de justicia solo aliviado por la brisa que corría junto al Lérez, en la zona cero de la competición, durante la jornada dominical, llamaba la atención lo bien apuntalado que está el futuro del triatlón, con participantes de todas las edades, incluidos los prebenjamines de la prueba Pho3nix Kids Triathlon Series by Javier Gómez Noya. También quedaba constancia de que son muchas las familias donde esta modalidad pasa ya de padres a hijos, que compiten a la vez en sus respectivas pruebas y categorías.

Precisamente, eso contaban con emoción unos hermanos mellizos de Narón llamados Krisztofer y Jázmin: «Ayer compitió papá [por el sábado] y hoy [por el domingo] nosotros, de 13 años. Habíamos venido a Pontevedra a ver competiciones, durante el Mundial, pero nunca habíamos participado en nada en la ciudad y esta vez sí que nos tocó y nos gustó un montón».

Pese al callo que ya tiene la ciudad organizando pruebas de triatlón de todos los niveles, incluido el más alto del mundo, aún son muchos los atletas que la descubren ahora, como algunos adolescentes que ayer, sobre las 13.30 horas, acababan de sudar la camiseta junto al Lérez. Era el caso de Manuel Aboal, un joven de Santiago de 16 años: «No fue mi mejor prueba compitiendo, pero la verdad es que estaba muy bien organizada, fue una maravilla».

En corro permanecían a esa misma hora varias atletas de un club que viajó desde Cedeira a Pontevedra. Alba, Irene y Sabela también habían participado en las pruebas dominicales y, todavía enfundadas en maillots verdes, indicaban: «Nunca habíamos competido aquí y nos gustó mucho. Pero fue duro».

Sobre las 14.00 horas, estaba previsto que comenzase la entrega de premios y se diese por concluida una nueva cita en mayúsculas del triatlón en la ciudad, donde volvió a notarse el tirón del deporte en los alojamientos, con familias enteras pernoctando, como contaba Julia, de Móstoles de 16 años: «Competí yo, pero hemos venido bastantes más».