«Cuando está la unidad de caballería, el índice de incendios es mínimo»

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Desde el pasado lunes y hasta el 1 de septiembre, la Policía Nacional despliega dos equipos compuestos de nueve agentes y seis equinos en Pontevedra y Santiago para combatir los fuegos forestales

03 jul 2024 . Actualizado a las 15:43 h.

Telirón, Faife, Garceta, Telva -«una de las más jóvenes»-, Polka y Umbenga. Son los nombres de los dos caballos y cuatro yeguas que, adscritos a la Unidad Especial de Caballería de la Policía Nacional, se han sumado al despliegue de medios contra los incendios forestales. Esta unidad, en paralelo, dará «seguridad en el Camino de Santiago», señaló Abel Losada, subdelegado del Gobierno en Pontevedra, quien dio la bienvenida a esta unidad que está operativa desde este lunes y hasta el próximo 1 de septiembre.

A la vista de su experiencia en años anteriores, Losada tiene claro que se trata de una unidad que «funciona muy bien, tanto en el tema forestal como en el apoyo al sector turístico en el Camino de Santiago». «La seguridad es un elemento social y político muy importante, pero es también un elemento económico muy importante. Tiene un valor económico indudable y, por lo tanto, conviene cuidarla y estar muy atentos a su consolidación y a su avance», añadió recordando que los caballo ahora desplazados a Pontevedra «son los que en los partidos de alto riesgo, normalmente en los grandes estadios, ayudan al mantenimiento del orden público. Se enfrentan a esas pandillas normalmente civilizadas de hinchas folloneros».

Labor diaria

Por su parte, el subinspector Julio Serrano precisó que realizarán su labor «principalmente en los montes gallegos» para prevenir los incendios, «que se pueden cometer de manera intencionada o de una manera imprudente». En este punto, destacó «la detección temprana» para dar aviso a los servicios de emergencia y, en su caso, colaborar con estos servicios en la evacuación de zonas donde se hayan producido incendios.

A este respecto, resaltó que las ventajas que ofrece las patrullas a caballo sobre otros vehículos se encuentran en «el acceso a lugares donde con vehículos a motor no se puede acceder». Así como «nuestro sigilo, por supuesto, a la hora de trabajar (...). Podemos acceder por cualquier lugar y no vamos a motor con lo cual el sigilo es algo bueno para nosotros».

En cuanto a la vigilancia del Camino de Santiago, incidió en que «hay zonas donde las competencias de Policía Nacional o la Unidad Adscrita a la Policía Autonómica dependiente de la Policía Nacional coincide con el Camino de Santiago, con lo cual aprovechamos la presencia de esa prevención de incendios para dar seguridad en el Camino», añadió rememorando que este despliegue se viene produciendo todos los veranos desde el 2013.

El refuerzo

En el caso de la provincia de Pontevedra, el plan de protección contra los incendios forestales (Pladiga) se reforzará con un equipo conformado por nueve agentes de la Policía Nacional y seis caballos. Asimismo, un contingente similar tiene su base en Santiago de Compostela. Como novedad, en este 2024 se contará, no solo con agentes de la unidad con base en Madrid, sino también de la de Sevilla.

Realizarán patrullas de lunes a domingo en servicios de mañana y de tarde. De este modo, el equipo destinado en la capital gallego se puede mover desde Viveiro pasando por Ferrol, A Coruña, Santiago o Monforte de Lemos, mientras que el de Pontevedra puede desplazarse a Ourense, Marín, Vigo o Vilagarcía en función de los que determine Jefatura Superior de A Coruña atendiendo a las peticiones y la incidencia de incendios en una determinada área geográfica: «Se ve cómo va a estar el tiempo esta semana y si va a hacer mucho calor en Ourense, por ejemplo, pues se da prioridad a Ourense», apuntó.

Experiencia personal

Tirando de su experiencia en este tipo de despliegues, en los que participa desde el 2020, el subinspector Julio Serrano tiene claro que «cuando está la unidad de caballería, el índice de incendios es mínimo, por lo menos, en nuestras zonas de Policía Nacional. Eso quiere decir que el trabajo que hacen los compañeros es muy bueno».

En cuanto a lo más complicado, «el calor», tanto para los agentes como para los equinos. «Aunque hace buen tiempo en Galicia, pero estamos en verano y hace muchísimo calor», añadió rememorando cómo, hace cuatro o cinco años, sus compañeros estaban patrullando por el entorno de Lérez y «pasó el tren, la catenaria soltó unas chispas y se incendió. Tuvieron que embarcar los caballos en el camión y colaborar con la propia manguera de los domicilios que estaban allí para pagar el incendio».