Ángel Santos, director de «Así chegou a noite»: «Financiar cine verdaderamente independiente no es sencillo»

El marinense Ángel Santos recaló este jueves en Novos Cinemas con lo que será su tercera película, Así chegou a noite: «Es la primera vez que voy a mostrar alguna imagen a alguien que no sea del equipo, como quien dice, y es un momento delicado también porque empiezas a abrirla al mundo después de mucho tiempo de estar como en petit comité».

—Al ser su tercer trabajo, ¿podríamos empezar a quitarle lo de emergente?

—Yo lo que creo es que ya soy un señor mayor. Tengo una edad, obvio, pero hacer tres pelis cuesta. Estamos viendo muchos cineastas que hacen primeras y segundas películas, sobre todo, primeras pelis hay muchas, pero hacer tres no es tan sencillo. Aunque sea con proyectos más pequeños o de más envergadura, llevo veinte años haciendo pelis. Siempre estamos aprendiendo, pero emergentes ya no.

—¿Por qué es tan complicado llegar a tres producciones?

Financiar cine independiente, verdaderamente independiente, no es sencillo. Hoy en día, hay como más cuotas, por decirlo así, para ciertas temáticas o ciertos hitos que parece que suman puntos a la hora de conseguir financiaciones. Pero cuando hay unas propuestas que se escapan un poco de los ítems que puedas clasificar, no es tan sencillo levantar las pelis. Y luego tienes que conseguir el apoyo de productoras que defiendan tu proyecto y que crean en el porque es un trabajo de muy largo recorrido. Estamos ahora presentando algunas imágenes, pero a los productores les queda como unos años por delante en los que todavía tienen que estar con ese trabajo. No es nada sencillo, hoy en día, producir de manera independiente. Hace falta un poco de tiempo y de calma.

—¿Qué supone para un cineasta como usted Novos Cinemas?

—Para mí, en concreto, es bastante especial porque soy parte de los tres fundadores del festival y lo dirigí durante cinco años. Es un festival muy especial. Pontevedra necesitaba un festival de cine y Novos Cinemas, yo que conozco muchos festivales, tiene algo especial que conecta muy bien con el Novo Cinema y con nuevas maneras de hacer que no estén muy clasificadas, sino que puede proponer riesgo y en Pontevedra funciona muy bien con la conexión con la Facultade de Belas Artes y con la de Comunicación. Se puede crear un tejido muy interesante, pero lo que siempre es necesario es que venga la gente joven a ver películas.

—Acaba de aludir al Novo Cinema, ¿no es ya en cierto sentido un cliché?

—Bueno, en cierto sentido, no. O sea, puede serlo. Quiere decir que en su momento fue una herramienta muy útil que servía para definir a un grupo de gente afín, que hacíamos propuestas afines, que trabajamos de una manera similar o que entendíamos el cine y la producción, sobre todo la producción de cine, cómo hacer las películas de una manera determinada, que en Galicia en ese momento no se destilaba demasiado. Quizás ahora hay como una resistencia a esto y es cierto que los autores van modificando sus maneras de hacer, pero lo bueno es que ha permitido que surjan nuevas cosas y que haya gente, como Adrián Canoura, que es de una generación mucho más joven que nosotros, pero que comparte, por lo menos, un impulso. No quiero decir ni que sea Novo Cinema Galego, pero lo importante es el impulso desde donde se crea. Tener referentes siempre ayuda.

—¿Y qué nos vamos a encontrar en su tercer trabajo, en «Así chegou a noite»?

—No lo sé. Espero que encontréis una película que os plantee preguntas, que abra ciertas maneras de ver o de relatar que no sé si son muy habituales. Sobre todo, es reflexionar un poco sobre el mundo en el que vivimos. Creo que es una película fácil de ver y que puede hacer pensar en nuestros deseos y necesidades de desconexión en estos tiempos tan hiperconectados.

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