Hay varias acciones que pueden ayudarnos a reducir el uso del móvil y las pantallas en verano, como activar varios períodos de modo no molestar al día, silenciar de forma inteligente los grupos de WhatsApp o revisar el correo con frecuencias preestablecidas
09 ago 2023 . Actualizado a las 20:51 h.Vivimos en una sociedad hiperconectada, rodeados de flujos de datos. Llevamos siempre con nosotros un terminal que hace mucho tiempo que dejó de ser solo un teléfono. Con él hablamos, nos comunicamos, conseguimos información, averiguamos a dónde tenemos que ir, compramos todo tipo de productos, revisamos nuestras cuentas bancarias, pagamos en el súper o en el bar y consultamos qué tiempo va a hacer, entre otras muchas cosas.
No podemos simplemente apagar o dejar de lado el smartphone cuando nos vamos de vacaciones, pero sí se pueden adoptar ciertas medidas para hacer más saludable nuestra vida digital (siguiendo una regla básica universal: cuanto menos tiempo con las pantallas, mejor) y disfrutar más paseando por la montaña, domando olas o, simplemente, estando acantonados en un chiringuito o encastillados en una tumbona.
¿Cuántas veces hay que mirar el correo?
Antes de que los móviles se convirtieran en nuestros socios inseparables, no podíamos estar pendientes todo el día del correo electrónico. Se consideraba aceptable demorarse en la lectura y en la respuesta. Esos tiempos pasaron. Y ahora tenemos acceso permanente a todas nuestras cuentas de Mail, pero eso no significa que haya que vivir pendiente de la bandeja de entrada, mucho menos en vacaciones. ¿Cuántas revisiones son razonables en una jornada? La respuesta corta y simple es depende (del momento, la urgencia o la importancia del mensaje que uno espera). La respuesta más completa está recogida en infinidad de guías de salud digital y productividad publicadas en internet, que suelen recomendar consultar el correo solo una o dos veces al día. Conviene recordar que las comunicaciones personales urgentes ahora ya no habitan por regla general en Gmail, Yahoo Mail, Outlook o Hotmail, sino en otras plataformas de mensajería.
Modo no molestar, la herramienta definitiva
La mejor herramienta para la desconexión veraniega la incorporan de serie los sistemas operativos de los móviles. Es el modo no molestar. Esta función que tienen tanto los dispositivos Android como los iOS (Apple) te permite elegir un número de horas en las que el smartphone no muestra notificaciones ni deja pasar comunicaciones no autorizadas por el usuario. Bien configurado, garantiza un sueño tranquilo y sin interrupciones evitando la opción extrema de poner el modo avión o de apagar el móvil cada noche, que comporta el riesgo de no recibir llamadas urgentes y/o importantes). En vacaciones cobra aún más importancia. Y conviene ajustarlo. ¿Cómo?
Para empezar se pueden alterar las horas en las que está activo y extender su tiempo de vigencia. Pongamos un ejemplo. Si en época laboral un usuario ha elegido que solo admite alarmas de despertador y llamadas de ciertas personas de once de la noche a siete de la mañana, en vacaciones puede alargar ese período a conveniencia.
Otra forma muy eficaz de programar una desconexión digital es dividir el día en varios tramos (poniéndoles nombres como «durmiendo», «en la playa», «de bares», «trabajando», «concentrado») y asignar diferentes permisos a notificaciones y comunicaciones. Por ejemplo, se pueden reducir las horas en las que tiendas digitales pueden mostrarte sus ofertas o que se muestren los wasaps de los compañeros del trabajo o de ciertos grupos de amigos. Solo es cuestión de configurar los filtros y activar o desactivar esos modos a voluntad. Y siempre se le puede dar total acceso a contactos determinados.
Los grupos de WhatsApp más ruidosos
Para completar una desconexión digital eficaz en vacaciones, hay que prestar un poco de atención a los grupos de WhatsApp, sobre todo a los de bombardeo constante de stickers, memes, bulos, comentarios cuñadescos... Una práctica habitual es silenciarlos. La herramienta de mensajería más popular en Europa permite hacerlo durante 8 horas, por una semana o para siempre. Son las opciones clásicas, sirven para contactos individuales y para grupos. Y no revelan al interlocutor o interlocutores que los has silenciado.
Hace unos meses la compañía hermana de Facebook e Instagram facilitó un poco más la tarea añadiendo un botón para silenciar desde la pantalla principal, sin entrar al chat (antes solo había los de «responder» y los de «marcar como leído»). Se puede usar para cualquier contacto. Eso sí, esta maniobra dejará por defecto los mensajes como no leídos. WhatsApp, que también activó en primavera la opción de ocultar conversaciones concretas y «muy especiales» de ojos curiosos, acaba de anunciar una nueva función: en breve implementará los chats grupales de voz al estilo Discord. ¿Se harán entonces aún más imprescindibles las herramientas para silenciar y desconectar?