La serie se acerca a un terror más oscuro en su cuarta temporada, cuyos cinco primeros episodios llegan a Netflix este viernes
27 may 2022 . Actualizado a las 09:05 h.Los niños de Stranger Things han pegado el estirón desde la última vez que estrenaron capítulos y este viernes regresan a Netflix con una cuarta temporada que apela a un miedo más adulto. Aquella historia de los hermanos Duffer que recreaba a Los Gonnies en una trama de terror juvenil se vuelve ahora más oscura para encarar el principio de su final. Su referente ahora es Pesadilla en Elm Street, con Robert Englund, que encarnó a Freddy Krueger en ocho películas y una serie de televisión, haciendo un papel en las nuevas tramas. «Trabajar con él ha sido increíble», comentó la actriz Natalia Dyer (que da vida a Nancy) en la presentación de la serie en Madrid. «Ha aportado al set una energía superpositiva y, sin querer hacer spoiler, hay un momento en el que tiene un monólogo muy sesudo y lo da todo. Fue una masterclass», aseguró
La cuarta temporada es la penúltima y tendrá una duración mayor que las anteriores, por lo que los creadores la han dividido en dos partes. La primera, que llega este viernes, está compuesta por cinco episodios y tendrá su continuación en un segundo volumen, con cuatro capítulos más, que llegará el 1 de julio. Más tarde llegará la quinta y última entrega, con la que esperan llegar al origen y al por qué de esa conexión con esa realidad paralela dominada por el mal.
La nueva trama arranca seis meses después de la batalla en el centro comercial de Hawkins. La familia Byers, acompañada por Once, que ha perdido sus poderes, ha abandonado la localidad de Indiana, pero en el pueblo parece que está surgiendo una nueva amenaza sobrenatural en torno al mundo de Del Revés. La pandilla de amigos, separada por primera vez, ha madurado sin perder la esencia que hizo de esta serie ambientada en los años ochenta una de las más vistas y más populares de esta plataforma.
Afectada por el parón provocado por la pandemia en el 2020, la serie ofrece su entrega más ambiciosa después de que en el confinamiento se refinaran las 800 páginas de su guion.