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El martes vuelve el verano a Galicia

Uxía Rodríguez Diez
UXÍA RODRÍGUEZ REDACCION / LA VOZ

SOCIEDAD

Xoán A. Soler

Mañana será un día de transición con cielos despejados y ascenso de temperaturas

27 jul 2019 . Actualizado a las 16:46 h.

Galicia va de frente en frente y de borrasca en borrasca. No tira porque la lleve la corriente, pero sí las nubes y los chubascos. Otra vez, nuestra comunidad ha sido uno de los refugios en medio de la ola de calor que ha batido récords históricos en Europa.

El último fin de semana de julio está cortado por los mismos patrones que han dejado un mes para nada veraniego y marcado por la inestabilidad.

«Las nubes se irán retirando poco a poco a lo largo de una jornada más despejada en el noroeste», explica Carlos Otero desde MeteoGalicia. Los termómetros seguirán con el descenso establecido en las últimas horas, con unas máximas que no superarán los 25 grados.

«Mañana será un día sin lluvias, de cielos más abiertos y de estabilidad, aunque esa estabilidad será transitoria. Entra una nueva borrasca, un nuevo centro de bajas presiones que se profundiza en el Atlántico y se aproxima por el oeste a Galicia, dejando lluvias en la madrugada del domingo al lunes», explica Otero. Es decir, un domingo que supondrá un respiro a la espera de que el martes vuelva el verano. Eso sí, no sabemos por cuánto tiempo.

«A nosotros nos está tocando este año una situación mucho más cambiante. Nos llegan flujos de aire del norte que arrastran más inestabilidad, mientras que en el este, en la zona del Mediterráneo y en Europa, los flujos de sur a norte hacen que sufran esas olas de calor. En Galicia estamos viviendo un julio nada normal, aunque parecido al del año pasado», aseguran desde MeteoGalicia.

¿Cómo vendrá el mes de agosto? «Comenzamos con una configuración más habitual y menos cambiante. Con influencia anticiclónica y tiempo más seco. Que esa situación vaya a persistir no podemos decirlo». 

JULIEN DE ROSA | EFE

Una Europa de récord

Mientras tanto, la ola de calor se despide de Europa dejando unas marcas nunca vistas en los termómetros de algunos lugares. París, con 42,6 grados, ha batido los 40,4 registrados en 1947. Alemania ha superado los 41 grados por primera vez desde que hay registros. 41,6 marcaban los termómetros en Lingen, en Baja Sajonia. La localidad holandesa de Deelen, al este del país, ha batido otro hito con 41,7 grados. En Bélgica nunca habían tenido unas temperaturas tan elevadas que han superado los 40 grados.