La crisis sanitaria por el coronavirus está sacando lo mejor de los gallegos, con multitud de acciones solidarias, pero también el lado más picaresco de algunos, que buscan cualquier excusa para saltarse el encierro decretado por el estado de alarma

la voz

Los gallegos llevan una semana de confinamiento en sus hogares. Desde que el Gobierno decretó el estado de alarma y limitó los movimientos de la población hasta hoy se han sucedido muchos y diversos acontecimientos. El coronavirus ha sacado lo mejor de las personas, con aplausos y conciertos diarios, emotivas historias humanas y solidaridad en estado puro. Pero también ha salido a la luz el lado más picaresco de algunos, que todavía se resisten a quedarse el máximo tiempo posible en casa. Estas son algunas de las cosas que han ocurrido en Galicia durante estos siete días de confinamiento:

Las excusas de los gallegos para salir de casa

Menos de una semana de confinamiento obligatorio para contener la pandemia del coronavirus ha sido tiempo suficiente para demostrar que la picaresca también tiene cabida en medio de una crisis sanitaria y que la inventiva de quienes tratan de saltarse la prohibición de salir de casa no la para un decreto de estado de alarma nacional.

De paseo con los perros... y las cabras

Los perros se han convertido en un verdadero salvoconducto para escapar, al menos durante unos minutos, del confinamiento que impone la expansión del coronavirus. Lo que no es tan normal es que al otro lado de la correa vayan atadas un par de cabras. Pero una imagen así pudo verse en pleno casco urbano de Monforte. Los vecinos de la calle Ourense vieron con asombro desde sus balcones cómo un hombre sacaba de paseo a una pareja de cabras.

Caseros que perdonan alquileres

Varios dueños de locales eximen del abono de la renta a sus arrendatarios. En Pontedeume, dos caseros perdonaron la siguiente mensualidad a una florista que acaba de ser madre y a una pareja que abrió hace poco una sala de eventos, ambos obligados a cerrar mientras dure la alerta sanitaria.

Una proposición de boda junto al mar acaba en multa

La Policía Local de la villa coruñesa de Ares sorprendió este jueves a una pareja en la cala de Estacas saltándose a la torera todas las medidas de aislamiento decretadas por el Gobierno central. El motivo esgrimido: una petición de boda. La idílica escena, que fue interrumpida por los agentes del orden durante uno de los controles aleatorios, acabó en denuncia.

Un padre que nunca se pierde el cumpleaños de su hija

Hace cinco años, cuando Paula Pérez cumplió 18 años, su padre, que es militar en la Brilat, regresó por sorpresa desde Afganistán para felicitarla. Esta vez las bombas caen en nuestras calles, sobre nuestras cabezas, y a su padre, el cabo primero José Manuel Pérez Gómez, le han movilizado. Por fortuna, porque quiso el destino que justo el día en el que su hija tenía que soplar las velas el Mando de Operaciones le incluyera en el despliegue que el Ejército hizo en Compostela. No pudo besarla, ni tocarla, pero al menos tuvo dos minutos para apostarse frente a la ventana de Paula, gritar un feliz cumpleaños y lanzarle un beso con la precisión de un francotirador.

Los estudiantes ayudan de forma altruista a sus vecinos

Los más vulnerables al coronavirus son las personas de más edad, y de ahí que hijos y nietos sientan la necesidad de protegerles incluso más que a ellos mismos. El principal problema es el grupo, cada vez más numeroso, de los mayores que viven solos o con familia alejada, que en las circunstancias actuales no pueden hacerse cargo de ellos. En el Ensanche de Santiago se promovió una iniciativa para romper la barrera de la soledad. Lo que inicialmente se pensó para acompañar a los mayores, ahora se puso en marcha como una reacción inmediata de la sociedad civil para ayudar a los mayores a realizar las tareas indispensables que les obligaría a salir a la calle.

Kraus canta desde la ventana a sus vecinos

Todas las tardes Enrique Paz Escudero se asoma al balcón para interpretar piezas líricas que perfeccionó hace casi medio siglo con el maestro Alfredo Kraus, del que fue su primer alumno y amigo para toda la vida.