Las visitas a las residencias de mayores, aplazadas hasta la fase 2

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO

SOCIEDAD

La Voz

El presidente gallego pidió a Sánchez que los progenitores puedan salir juntos a la calle, un protocolo claro para el uso de mascarillas en la calle y mayor coordinación con las comunidades para el cobro de la renta mínima vital

17 may 2020 . Actualizado a las 21:04 h.

Feijoo participa este domingo en la décima videoconferencia entre Pedro Sánchez y los presidentes de las comunidades autónomas, a la que ha llevado propuestas concretas para avanzar en la desescalada y también agradecimientos al Gobierno por la buena receptividad a iniciativas planteadas por Galicia, como permitir de nuevo la caza y la pesca; la apertura de establecimientos de más de 400 metros cuadrados (limitando espacios); o las aclaraciones sobre las rebajas.

Pero también hubo reveses para Galicia, porque la Xunta no podrá activar las visitas a residencias de mayores que quería regular a partir de mañana lunes de forma gradual y solo en los centros que estuvieran limpios de coronavirus desde dos semanas antes. Para Feijoo no tiene sentido que hace una semana el mando único permitiese la apertura de los centros de día, que supone la entrada y salida constante de mayores desde sus domicilios a esos espacios, y que ahora haya bloqueado la iniciativa de Galicia de activar las visitas de un familiar una vez a la semana hasta que se alcance la fase 2, dentro de una semana. «Isto é improvisación, porque non estaba regulado e non é xeito de traballar», lamentó el titular autonómico, que en su valoración del encuentro insistió en que su Gobierno va a seguir asumiendo los mandatos de Madrid aunque no esté de acuerdo en algunos aspectos. Por ello, va a utilizar estos días para pedir aclaraciones y explicar bien el proyecto gallego por si se pudiera activar a mediados de semana. De otra forma, se esperará a la entrada en la fase 2 para cumplir con la orden del BOE.

Precisamente el avance de fases mereció un nuevo comentario del presidente gallego sobre la falta de información que siguen teniendo las comunidades sobre los baremos que utiliza el Gobierno para decidir qué territorios pueden cambiar de etapa. Feijoo recordó que en las próximas horas Galicia deberá presentar su «candidatura» para la fase 2 e ignora los parámetros que se van a utilizar para valorar su situación. Lo que sí tiene claro es que la comunidad volverá a pedir al Ministerio de Sanidad que todo el territorio gallego se trate como una unidad, sin diferenciación de provincias, toda vez que los estudios epidemiológicos del Gobierno y del Sergas arrojaron una incidencia muy baja y homogénea. 

Sobre aspectos territoriales, Feijoo también defendió que se modifiquen las restricciones para la práctica de deportes entre distintos municipios para solventar la incoherencia de que una persona pueda cambiar de concello en su provincia para ir a una terraza y que no tenga esa misma movilidad para una práctica como puede ser el ciclismo, correr o el surf. 

En el ámbito de las matizaciones a las instrucciones del mando único, el titular de la Xunta dirigió esta vez sus reivindicaciones a aspectos concretos de las normas de desescalada, y propuso que ambos progenitores puedan salir con sus hijos en las franjas horarias que les corresponden a los menores. Por otra parte, Feijoo se ha mostrado crítico con la falta de información del mando único sobre asuntos estratégicos como la educación y las políticas sociales, ámbitos en los que echa en falta protocolos comunes de actuación que han llevado a las respectivas consellerías a avanzar decisiones por su cuenta. «Non hai criterio, e iso vai impactar no fracaso escolar. Se o Goberno segue sen concretar o faremos nós de xeito inmediato», dijo Feijoo, quien  aseguró que esta semana el comité de expertos que asesora al Sergas se va a pronunciar sobre la apertura o no de las escuelas infantiles de 0 a 3 años. Según  el presidente, los pediatras gallegos sí están a favor de la reapertura de estos centros, pero hay opiniones diferentes en la sociedad española de esta especialidad. 

En el plano socioeconómico, Galicia considera necesario que se cierren este mismo mes los criterios para el reparto entre las comunidades de 16.000 millones de euros, un modelo que inicialmente no ha gustado en la Xunta por cuanto no utilizar los criterios habituales de la financiación autonómica pero que se debe concretar para que se puedan ejecutar cuanto antes. Feijoo sugirió que al menos sí se recurra al mismo criterio que sirvió para repartir fondos sanitarios, porque 10.000 millones de esa partida deberán tener este fin y, a su juicio, deberían trasladarse a las comunidades autónomas ya que son estas las que han asumido los gastos sanitarios.  

El presidente también pidió información sobre la renta mínima vital que el Gobierno quiere lanzar de forma inmediata sin que, a su juicio, se haya coordinado este pago a las familias más desfavorecidas con los subsidios que también tienen los ejecutivos autonómicos. La Xunta recibió una solicitud de Madrid para trasladar la relación de gallegos que reciben ingresos como la Risga, pero la Administración gallega ha mostrado sus dudas sobre la legalidad de compartir esos datos, además de poner en duda que alguien esté dispuesto a renunciar a una prestación consolidada a cambio de otra de que la que todavía se desconocen  los detalles. En este punto, advirtió que los ciudadanos prefieren un empleo a un subsidio, de ahí que pidiese una reconsideración sobre los cien millones de euros que ha perdido la Xunta para el plan de formación laboral.

El uso de las mascarillas

Lo que no se ha despejado en la videoconferencia ha sido el papel que van a jugar las mascarillas en las próximas semanas como medida de protección. Cuestionado al respecto, Feijoo aseguró que Galicia ha pedido de forma reiterada un protocolo común, teniendo en cuenta que los servicios de medicina preventiva de distintas comunidades coinciden en que se trata de un elemento eficaz para espacios cerrados o incluso abierto cuando no se puede mantener la distancia de seguridad. Hay presidentes que han pedido la obligatoriedad, «e eu pido coordinación», dijo Feijoo, que cree que sería bueno una norma única y conocida para que los ciudadanos dejen de tener recelos cuando ven a otros con o sin mascarilla. En todo caso, se mostró partidario de su uso en la calle para las personas que se quieran sentir más seguras y para aquellas que presenten alguna sintomatología compatible con el coronavirus.