Productores y cocineros aunaron fuerzas para demostrar calidad y sorprender con originales elaboraciones en directo
09 may 2024 . Actualizado a las 20:15 h.La gastronomía de la provincia de A Coruña dejó huella y sabor en Madrid Fusión, la gran cita culinaria internacional que acabó ayer tras tres jornadas muy intensas. Lo hizo de la mano del área de Turismo de la Deputación, única de las cuatro gallegas que ha apostado por aunar a productores muy diversos y preparación de producto. De los primeros, muy variados: cafés de Aruba, empanadas de Costumes, licores de Bello Blanco, galletas Maruxas de Nata, vermús de Lodeiros, vinos de Choiva, quesos Galmesán, patatas fritas de Bonilla a la vista y muchas legumbres y otros productos de A Despensa de Lujo.
De los segundos, cocineros reconocidos de zonas diferenciadas de la provincia que, además de trabajar en directo y dar a probar sus elaboraciones, ofrecieron pequeñas charlas sobre su filosofía de trabajo. Hay algo común a todos: producto local, proximidad, paisaje y territorio, máxima calidad y respeto total al producto. Uno de los artistas de los fogones fue el fisterrán Brais Pichel, estrella Michelin y sol Repsol, candidato a Cocinero Revelación que deberá intentarlo un año más, ya que la victoria se la llevaron los cocineros del Osa de Madrid.
Ayer, entre otras muchas opciones, Rafa Varela y Silvia Facal, del hotel y restaurante Balarés de Ponteceso, prepararon berberechos del Anllóns y unas navajas con guisantes bágoa, que salen de A Despensa de Lujo, de Coristanco.
Los primeros generan una «explosión de sabor a mar». Los guisantes, pequeños y exquisitos, son el «caviar de la huerta», dijo Varela. La emoción por el qué, el cómo y el dónde está detrás de todo este trabajo. Rocío Martínez, de Pementa Rosa, optó por una xilda de jurel de Malpica y verduras de la feria de Carballo, además de una vieira de Ferrol con cebollas de Baldaio (entre otros muchos ingredientes, en ambos casos) que causaron sensación, como el resto.
Estos días, el estand de la Deputación ha sido una pasarela de platos para los que es fácil recurrir por lo menos a un tópico (real): un festival de sabores, con mucha innovación tanto en platos convencionales como en postres, tapas o helados. Además están los vinos y vermús de la provincia, aún poco extendidos, pero con una historia y calidades que estas tres jornadas se han podido descubrir.
Xosé Regueira, vicepresidente de la Deputación y responsable del área de Turismo, se mostraba satisfecho de cómo ha ido esta feria: «Restaurantes e produtores din que tiveron impacto. Fixéronse contactos, e mesmo acordos nestes días. A proxección do territorio a través da súa cociña tamén nos interesa, e máis nun foro tan importante coma este», explica.
Considera que se ha visto «moita calidade, e cun discurso ligado ao territorio, cunha gastronomía excelente da que se pode disfrutar máis aló do verán, durante todo o ano. Na Deputación dámoslle cobertura a estas empresas (máis de cen dende o 2018) que, doutro xeito, terían máis complicado asistir a feiras coma estas».