Regístrate gratis y recibe en tu correo las principales noticias del día

El CPR Montesol de Vigo explica su plan para el concurso de ciencia de Voz Natura

cristóbal ramírez

SOCIEDAD

Agua, papel, purificación y filtración son las claves en el trabajo de este centro

10 feb 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Pasó la Candelaria (Candieira en gallego), así que la mitad del invierno está fuera. Avanza el curso y avanzan los centros que participan en el concurso de ciencia que organiza Voz Natura, y cuyo plazo de entrega de trabajos remata el 30 de abril. Hay tiempo, pero lo que jamás hay que hacer es malgastarlo.

Porque en algunas cosas el reloj corre en contra. El deterioro del medio ambiente es notable e innegable, y por supuesto mucho más en ese desastre ecológico que significan las guerras (Ucrania, Gaza, Sáhara, Congo…). Y aprovechar el tiempo quiere decir hacer uso de la ciencia para proteger ese medio.

Y de eso trata Voz Natura, una iniciativa de La Voz de Galicia y la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre, y que cuenta con el apoyo y respaldo de la Xunta, la Diputación de A Coruña, la Fundación Alcoa, El Corte Inglés, la Fundación Ramón Areces e Inditex. Este curso el tema es -como resulta ampliamente conocido- el uso de la ciencia y el método científico para proteger el medio ambiente. De ahí se derivó en enero la convocatoria del concurso, con dos categorías: microexperimento, y estudio o investigación.

Lo sabe muy bien Cristina Díaz Prego, y lo sabe muy bien porque su centro, el CPR Montesol de Vigo, ha sido uno de los que ya ha entregado su trabajo. Ella, humilde, ni siquiera cita en la conversación que en su currículo figura uno de los capítulos de un libro muy bien conceptuado en el sector, Pensar científicamente. Problemas sistémicos y acción crítica.

«Participamos en el concurso con una investigación centrada en reciclaje y cuidado del medio ambiente, con un enfoque en agua y papel», manifiesta la profesora, quien especifica: «Busca concienciar sobre la protección del agua, estudiando su purificación y filtración, y sobre el impacto del consumo de papel, promoviendo el reciclaje».

Cristina Díaz atribuye el mérito a «un total de cuarenta de nuestros estudiantes de 4.º de ESO, que construyeron, utilizando metodologías activas de trabajo colaborativo, un diseño con elementos reciclados para uso en reciclaje y depuración».

Como todo el mundo que se presenta a un certamen, la ilusión y el deseo de ganar están presentes, pero en este caso el objetivo es también que los alumnos sean agentes de cambio, desarrollando conciencia crítica y aportando soluciones mediante investigación, análisis y comunicación de resultados. 

Llueve sobre mojado, porque el CPR Montesol se ha destacado siempre por acciones directas en este campo. Por ejemplo, funciona, y muy bien, su huerta escolar intergeneracional: desde el 4 de febrero hasta el 17 de junio se lleva a cabo una innovadora actividad en la cual los abuelos comparten experiencias y conocimientos con sus nietos, alumnos de Educación Infantil y de los primeros cursos de Primaria.

Y todavía tienen tiempo para llevar a cabo la limpieza de un arenal de su entorno. No lo dejaron para última hora: en octubre cuatro decenas de alumnos participaron en esa actividad. «No solo contribuimos a eliminar desechos, sino que también fomentamos una mayor conciencia ambiental en nuestra comunidad», dice la profesora Cristina Díaz, que remata, infatigable y optimista: «Cada bolsa de basura recogida es un paso para inspirar a otros a adoptar hábitos más sostenibles, y un recordatorio de la importancia de cuidar nuestro planeta y valorar la riqueza de nuestros ecosistemas».