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Aplicar medidas de eficiencia energética en las granjas puede suponer una rebaja de un 10% en el consumo

Somos Agro REDACCIÓN

GANADERÍA

RAFAEL ESTEVEZ

Amplían las ayudas para instalar métodos que mejoren el uso de la energía en las explotaciones agropecuarias

07 ago 2024 . Actualizado a las 11:28 h.

Buscar la eficiencia energética no es un capricho. En una explotación agropecuaria, donde el consumo eléctrico supone una importante partida de gasto, puede suponer un ahorro de hasta una rebaja del 10% en el consumo según los cálculos de la Conselleria de Economía. De ahí que este departamento de la Xunta,  a través del Instituto Energético de Galicia (Inega), ha ampliado en 1,7 millones de euros los fondos destinados a la convocatoria de ayudas para financiar la eficiencia energética en el sector agropecuario gallego, elevando el total a 5 millones de euros. Esta ampliación busca beneficiar a un centenar de beneficiarios, tal como se publica en el Diario Oficial de Galicia (DOG).

Inicialmente, esta línea de ayudas, convocada el pasado año, ya benefició a 72 empresas, autónomos, comunidades de regadío y asociaciones de productores de Galicia, con un importe de 3,2 millones de euros que generarán una inversión asociada de 10,7 millones de euros. Con la ampliación de fondos, se prevé apoyar otras 28 actuaciones adicionales.

Las ayudas, que pueden alcanzar hasta un máximo de 1 millón de euros por expediente, están destinadas a promover la implantación de energías renovables en las explotaciones agropecuarias y a renovar las instalaciones de regadío y equipos de bombeo. 

Entre las actuaciones cubiertas se incluyen mejoras en la envolvente térmica de edificios agropecuarios, como fachadas, cubiertas y ventanas, incorporando soluciones bioclimáticas que reduzcan la demanda de calefacción y refrigeración. También se contemplan mejoras en instalaciones térmicas de calefacción, refrigeración, ventilación y agua caliente sanitaria, que son esenciales para procesos como la pasteurización y conservación de productos perecederos, la climatización de naves de ganado e invernaderos, y la refrigeración en procesos de fermentación del vino. Además, se fomentará el aprovechamiento de calores residuales y la creación de nuevas redes de calor.

Se incentivará la implantación de energías renovables térmicas, como la energía solar térmica, biomasa, energía geotérmica, energía ambiente (aerotermia o hidrotermia), bombas de calor, o una combinación de estas tecnologías. También se financiará la reforma o sustitución de instalaciones de iluminación interior y exterior, así como la renovación de motores para accionamientos mecánicos y otros servicios agropecuarios.

Respecto a los sistemas de regadío, las ayudas cubrirán el cambio de grupos de bombeo por otros más eficientes, la implantación de variadores de frecuencia y arrancadores estáticos, y el uso de sistemas de regulación, control y monitorización de redes de riego que contribuyan al ahorro energético. No serán elegibles aquellas actuaciones que aumenten el consumo de agua o de la superficie regable.

Para las empresas, la ayuda no superará el 35 % del coste subvencionable de la actuación. Este porcentaje se incrementará en un 20 % para pequeñas empresas y en un 10 % para medianas empresas.