España inyecta 5,7 millones al CSIC para que investigue los «stocks» pesqueros y el hábitat marino
SOMOS MAR
Suscribe un convenio, con fondos del plan de transformación y resiliencia, para cumplir su compromiso de realizar un uso sostenible de los recursos y tomar decisiones en base al mejor conocimiento científico
09 sep 2021 . Actualizado a las 04:47 h.La gestión pesquera exige cada vez más avales científicos. Certificados de que una población se encuentra en buen estado biológico para mantener o incrementar las posibilidades de pesca. Y eso requiere investigación, conocimiento, certezas que conjuren ese socorrido principio de precaución, que reza que, ante la duda, mejor no pescar o extraer lo menos posible por eso de que no colapsen los pescadores.
De ahí que la potenciación de la investigación marina se encuentre entre los ejes del plan de recuperación, transformación y resiliencia diseñado para la pesca. Precisamente de ahí, de lo reservado para Impulso de la sostenibilidad, la investigación, innovación y digitalización del sector pesquero, saldrán los 5,7 millones de euros que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación inyectará al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) este año y los dos que vienen para que sus científicos y los del Instituto Español de Oceanografía (IEO) —ahora también en la plantilla de la macroagencia— realicen trabajos de investigación marina que permitan sentar las bases de una gestión pesquera sostenible.
A eso responde el convenio que ayer firmaron la secretaria general de Pesca, Alicia Villauriz, y la presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, que se asienta sobre siete pilares que apuntalarán la sostenibilidad de la pesca.
Según Villauriz, este acuerdo forma parte del compromiso de apoyo de la Secretaría General de Pesca a las entidades científicas de nuestro país, al tiempo que se cumple con los principios de la política pesquera común (PPC), que abogan por apoyar y reforzar la investigación y la innovación en todos los ámbitos de la actividad pesquera. Su objetivo principal es establecer un marco de colaboración entre ambos organismos para la realización de actividades de análisis, estudio y generación de conocimiento, para garantizar una mejor gestión de los recursos pesqueros de acuerdo con el triple principio de la sostenibilidad: biológica, social y económica.
Además, el acuerdo va a facilitar el intercambio de información y la realización de actividades de comunicación y formación conjuntas en el ámbito de la sostenibilidad pesquera.
Mortalidad de los cetáceos
El convenio recoge siete ejes de actuación, entre los que se encuentra disponer de los mejores dictámenes científicos, técnicos y económicos de cara a la ampliación del plan plurianual de la Unión Europea para el Mediterráneo, informó el Ministerio de Agricultura en un comunicado.
Asimismo, prevé acciones de monitorización, evaluación y reducción de la mortalidad accidental de cetáceos ante posibles interacciones con la flota pesquera. También se probarán nuevas tecnologías y herramientas en los análisis para incluir el uso de la inteligencia artificial en la obtención de datos, y se impulsará el conocimiento científico para desarrollar estrategias y mecanismos de gestión participativa que permitan mantener a las poblaciones de peces en su rendimiento máximo sostenible (RMS).
Otra de las acciones recogidas en el convenio es el seguimiento de las poblaciones de coral rojo en aguas exteriores en las costas españolas, la aplicación de nuevas herramientas para el modelado matemático en el asesoramiento científico de las pesquerías españolas y el diagnóstico de situaciones de riesgo de afección sobre los ecosistemas marinos vulnerables, desarrollo de mecanismos de detección temprana y estrategias de prevención de daños.
De esta manera, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación dice querer reafirmarse en su compromiso de realizar un uso sostenible de los recursos marinos, de forma que el mejor conocimiento científico disponible siga siendo el primer pilar en la toma de decisiones.