Bioplásticos elaborados con residuos, otra apuesta verde de las industrias del mar
SOMOS MAR
Fondos Nex Generation financian un proyecto liderado por Anfaco que interesa a varias empresas
28 mar 2022 . Actualizado a las 07:53 h.La sostenibilidad medioambiental, económica y social es uno de principios de las industrias del mar, desde la pesca a la transformación, y de la acuicultura. Para el 2030 la Unión Europea (UE) se propone sustituir un 30 % de los plásticos de amplio uso en alimentación, como el polipropileno (PP) y polietilenos (LDPE y HDPE). Celulosa y ácido poliláctico (PLA), ambos con un 18,7 % ,dominan el mercado de las alternativa a los plásticos convencionales, donde los bioplásticos, concretamente los polihidroxialcanoatos (PHA), representan el 1,7 % de la producción total de plásticos y bioplásticos. Con fondos Next Generation, Anfaco-Cecopesca lidera el proyecto Biocenplas, otra apuesta verde que pretende aprovechar los residuos sólidos y líquidos del sector transformador para producir bioplásticos.
Biocenplas es el acrónimo que sintetiza los objetivos: biorrefinería centralizada para la valorización de efluentes del sector transformador de pescado en forma de bioplásticos. Arrancó en diciembre un proyecto en el que se invertirán 811.054 euros, el 85,25 % aportados por la UE y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Para finales del 2023 se esperan los resultados, las bases las bases científico-técnicas de la transformación de proteínas en bioplásticos.
Anfaco resume en un comunicado los objetivos: «Demostrar a la Industria transformadora de la pesca (conserveras, cocederos, productos elaborados, congelados…) que la biotecnología, los efluentes residuales y subproductos que se generan son potenciales materias primas para la producción de materiales biodegradables aplicables como sustitutos del plástico tradicional».
Así prevén aprovecharlos
Menos consumo energético, menos impacto ambiental y, a mayores, el ahorro económico y social que supone tratar los residuos sólidos y líquidos del sector. ¿Como contribuirá a mejorar la sostenibilidad el sistema biotecnológico propuesto? Anfaco explica que en una primera etapa la materia orgánica del residuo se convierte en ácidos grasos volátiles, el alimento del cultivo microbiano, y se acumula el biopolímero en el interior de las células microbianas. Después el biopolímero se extrae de los organismos microbianos y se convierte en bioplástico.
Señalan como principal ventaja de este proceso que los bioplásticos «se pueden gestionar junto con otros residuos orgánicos ya que se degradan en el medio ambiente en pocos meses, al contrario que los plásticos convencionales, que pueden necesitar cientos de años» . Los PHA, añaden, reducirán significativamente el impacto ambiental de los convencionales, produciendo también un beneficio social. Actualmente ya se elaboran bioplásticos a partir de otros subproductos, como los carbohidratos agrícolas. Los promotores de Biocenplas apuntan que su propuesta introduce como novedad la generación de biopolímeros a partir de corrientes más ricas en proteínas, con lo cual la composición final será distinta y, por tanto, sus potenciales aplicaciones.
Con Anfaco-Cecopesca conforman el consorcio de Bioceplans el Cetaqua (Centro Tecnológico del Agua) y el Centro Interdisciplinar de Investigación enTecnologías Ambientales (CRETUS) de la Universidade de Santiago de Compostela (USC). Varias empresas del sector están interesadas en poner en valor sus residuos y, según los promotores, el proyecto lo apoyan firmas como Nueva Pescanova, Pescados Rubén, Ignacio González Montes, Atunlo o Mejillones Nida.