La propietaria de Sonia's Fish, en el mercado de O Calvario de Vigo, dispensaba a 8,80 euros el kilo de sardina grande y a 4,80 el de piezas pequeñas
24 jun 2022 . Actualizado a las 02:31 h.Para Sonia Barral, la sardina no se está vendiendo tanto como en los dos últimos años por el fin de las restricciones sanitarias. «De nuevo hay fiesta, así que mucha gente se va a restaurantes y sitios donde las asan, las preparan, las acompañan con su vinito y su pan...», señala. Ayer, la propietaria de Sonia's Fish se acercó hacia las 03.30 horas de la mañana hasta la lonja del puerto de Vigo para hacerse con un buen acopio de las reinas del San Xoán. Ha conseguido una buena cantidad de la ría: «Son de ardora, pescadas por fuera de las islas Cíes».
La pescantina vendía las sardinas ayer en la entrada del mercado de O Calvario por 8,80 euros el kilo «la más grande», y por 4,80 otra «más pequeñita, eso es según el gusto de la persona». A eso de las once de la mañana todavía le quedaban varias bandejas por colocar. «¡Creo que vendimos más durante la pandemia!», relata Barral, quien tiene la sensación de que también se han limitado las ventas en la plaza por la inflación que azota a la economía en general.
«No se ve la cosa demasiado animada», continúa para referirse a que ella, hasta su puesto en Vigo, prepara los pedidos que ya prevé de sus clientes, «y algo más por si hace falta».
Sobre la forma de cocinar las sardinas, la dueña de Sonia's Fish apunta a la brasa como la opción más distinguida entre toda su clientela, «pero para quienes no la puedan comer así, la preparamos a la plancha». Tampoco se olvida de la posibilidad de quitarle las espinas y rebozarla.
Sonia, que lleva más de treinta años en activo en el mundo pesquero, trabaja junto a su hija, que se encarga de transportar y distribuir el pescado.