El organismo contrata una consultora por 350.000 euros en cuatro anualidades
13 oct 2022 . Actualizado a las 20:47 h.La Autoridad Portuaria de A Coruña comunicó este jueves el inicio del proceso de renovación de sus objetivos estratégicos a corto y medio plazo con el fin de «consolidar el crecimiento del puerto» en el contexto actual, marcado por una situación de incertidumbre a nivel global pero con buenas expectativas en el caso de punta Langosteira. Para ello, el organismo que preside Martín Fernández Prado licitó la contratación de una asistencia técnica que lo apoyará en la implantación y seguimiento de los nuevos objetivos para los próximos tres años.
El presupuesto de licitación asciende a 350.000 euros, divididos en cuatro anualidades hasta el 2025, con una partida inicial de 50.000 euros en el presente ejercicio.
En su trabajo conjunto con el equipo directivo de la Autoridad Portuaria, la consultora ayudará a definir los proyectos de futuro en el contexto del nuevo marco estratégico del sistema portuario español y el escenario internacional marcado por el impacto de la pandemia, así como el plan de recuperación. También deberán tomarse como referencia las exigencias de sostenibilidad, la evolución de los costes de la energía y el transporte marítimo, así como la incertidumbre actual en los mercados energéticos.
El horizonte temporal del plan está marcado por el traslado de la terminal de Repsol desde el puerto interior a sus nuevas instalaciones en el exterior, así como la construcción del acceso ferroviario a punta Langosteira y la liberación y reordenación de espacios en el puerto interior. Además, contemplará el desarrollo de A Coruña Green Port, el proyecto diseñado para aprovechar el potencial de las energías verdes y generar negocio al tiempo que se avanza en la sostenibilidad y la eficiencia energética. Las aportaciones deberán apuntar a un plan abierto, que se pueda ir adaptando a la volatilidad.
Adiós a la cantina y el local social del puerto
Por otra parte, algunos trabajadores jubilados y en activo se despidieron del local social y de la cantina que fueron derribados en Calvo Sotelo. «Estos lugares dieron un sinfín de servicios a los trabajadores durante décadas», destacaron desde UGT.